Las compañías del Ibex-35 tenían 805 filiales en paraísos fiscales el año 2018, lo que supone un 6% menos que el ejercicio anterior, mientras que los 13.000 millones de desvío de beneficios empresariales hacia estos refugios fiscales conlleva una pérdida fiscal a España de 3.250 millones de euros.
Así se extrae del informe anual del Ibex-35, elaborado por Oxfam Intermon, que refleja cómo en 2018 se volvió a constatar que las empresas siguen reduciendo su presencia en paraísos fiscales, aunque a un ritmo "insuficiente", ya que en 2017 se redujeron un 14% y el último año solo un 6%.
De esta forma, las compañías del Ibex no acabarían de liquidar su presencia en estos territorios hasta dentro de 15 años, en el año 2033. De las 35 empresas del Ibex, 13 han reducido el número de filiales en paraísos fiscales, cuatro lo han aumentado y en 18 casos no ha habido variación.
El informe destaca el esfuerzo "destacable" de BBVA, Repsol y Arcelor Mittal, ya que la primera redujo su aún notable presencia en estos territorios un 33%, y en un 14% las dos últimas. Además, apunta que hay cinco empresas (Aena, Bankia, Ence, Inmobiliaria Colonial y Merlin Properties) que no tienen presencia alguna en estos territorios.
En cambio, hay cinco empresas con más de 50 filiales en estos territorios --Banco Santander (207), ACS (102), Repsol (70), Ferrovial (65) y Arcelor Mittal (55)--, que concentran el 62% del total de filiales de empresas del Ibex-35 en paraísos fiscales.
La organización incide en el caso de Banco Santander, con 207 filiales, ya que dobla en número de filiales al siguiente, ACS (102), y aglutina una de cada cuatro filiales de empresas del Ibex-35 en paraísos fiscales.
Un año más, el paraíso fiscal preferido por las empresas del Ibex-35 es Delaware, sede de 352 filiales, que junto con Holanda (119 filiales), Irlanda (75) y Luxemburgo (56) acumulan el 75% del total de filiales de empresas del Ibex-35 en paraísos fiscales.
"Es una clara apuesta de las empresas del Ibex-35 por los territorios más nocivos en competencia fiscal, aquellos que atraen la mayor parte de la inversión fantasma y los preferidos por empresas de todo el mundo para desviar beneficios", denuncia Oxfam Intermón.
Pérdidas de 3.250 millones
Según los datos del estudio, el desvío de beneficios empresariales hacia paraísos fiscales le cuesta a España el equivalente al 13% de la recaudación del impuesto sobre sociedades, lo que supone una pérdida fiscal de 3.720 millones de dólares (3.250 millones de euros), debido a los 14.880 millones de dólares (13.000 millones de euros) que las empresas desvían hacia estos territorios.
Los paraísos fiscales dentro de la propia UE se llevan el 80% de esta cantidad. Por países, Holanda genera una pérdida de recursos fiscales a España de 1.161 millones de dólares (1.043 millones de euros) cada año; Luxemburgo, de 865 millones de dólares (777 millones de euros); e Irlanda, de 644 millones de dólares (578 millones de euros).
Por la fuga de beneficios empresariales hacia estos tres países, España pierde el 9,6% de la recaudación del Impuesto de Sociedades. Como consecuencia de este desvío, el incremento en la aportación fiscal de las empresas en el último año fue sensiblemente menor que la de los resultados contables positivos reportados a Hacienda.
Frente al aumento del 7,3% de la recaudación del Impuesto de Sociedades, el resultado positivo total que las empresas declararon se incrementó un 12,9%, casi el doble. En lo que va de siglo, las empresas han reducido la proporción de sus beneficios que acaban en el impuesto empresarial.
Si en el año 2000 las empresas con resultados positivos contribuían con el 21,42% al Impuesto de Sociedades, en el 2018 sólo lo hicieron con el 9,91%. Este diferencial se puede explicar en parte por la disminución del tipo nominal del impuesto, pero también por prácticas de elusión fiscal y la utilización de paraísos fiscales, según el informe.
Créditos fiscales
En cuanto a los créditos fiscales, aquellos derechos que tienen las empresas de deducirse importes de su futura factura fiscal, Oxfam Intermón avisa de que impactan en la recaudación y cifra el importe de los mismos en 66.142 millones en 2018, más de dos veces y media el importe que recaudó el Impuesto de Sociedades.
Aunque las empresas cuentan con ciertas limitaciones para su utilización, ya que cada ejercicio sólo pueden usar el 25% de esos importes para reducir su factura fiscal, suponen una amenaza para la suficiencia del sistema fiscal, añade el informe.
Sueldo 123 veces mayor
El informe también constata que la diferencia entre el sueldo más alto y el salario medio de cada empresa del Ibex 35 es de 123 veces.
En 2018, mientras que el sueldo medio de las personas que trabajan en las empresas del selectivo español se redujo un 1,2%, el de los altos directos se incrementó un 6%. Además, el 40% de las empresas presentan una brecha salarial de género superior al 20%.
En concreto, Inditex, Naturgy y ACS, figuran entre las empresas con la brecha salarial más elevada, si se compara el sueldo más alto y el sueldo medio de la empresa.
En la empresa fundada por Amancio Ortega el sueldo más elevado es 455 veces superior al salario medio, mientras que en Naturgy la diferencia es 424 veces y en ACS, la brecha es de 388 veces.
También destacan por tener una brecha elevada Banco Santander (257), Acciona (256), Iberdrola (221), BBVA (213) Telefónica (184), CIE Automotive (179) y ArcelorMittal (174 veces).
Por otro lado, Aena (4 veces), Bankia (15) y Red Eléctrica (18) destacan por ser las empresas en las que la diferencia entre el suelo más alto y el sueldo medio es menor.
Teniendo en cuenta el sector, las empresas financieras y de la industria y construcción son las que cuentan, en promedio, con un mayor número de ámbitos que contribuyen a aumentar la desigualdad.
En 2018, el salario medio de las empresas del Ibex 35 fue de 35.810 euros, lo que representa 1,5 veces el salario medio en España. Según Oxfam, los sueldos medios más bajos se dan en Inditex (20.865 euros), CIE Automotive (21.482 euros) y Meliá Hotels (21.669 euros).