En plena carrera de promesas electorales en materia de impuestos para el 10-N, los últimos datos publicados este miércoles por Eurostat, la oficina estadística comunitaria, arrojan más claridad sobre la posición de España en esta materia dentro de la Unión Europea. Nuestro país se sitúa entre los Estados miembros donde la presión fiscal es más baja que la media, pese a la subida de casi un punto entre 2017 y 2018.
En concreto, los ingresos totales procedentes de impuestos y cotizaciones sociales en España ascendieron en 2018 al 35,4% del producto interior bruto (PIB). Es decir, cinco puntos por debajo del promedio en la UE (40,3%) y seis puntos por debajo de la media de la eurozona (41,7%). Nuestro país es el undécimo país de la UE con menor presión fiscal (de un total de 28) y el octavo si se tiene en cuenta sólo a los 19 de la eurozona.
En cuanto a la estructura de ingresos fiscales en España, la principal categoría son las cotizaciones sociales, que equivalen al 12,4% del PIB (por debajo del 13,3% de media en la UE). Le siguen los impuestos sobre la producción y las importaciones, que suman el 11,9% del PIB (frente al 13,6% en la UE). El más importante es el IVA, que representa el 6,6% del PIB (7,1% de promedio comunitario).
Los impuestos sobre la renta y el patrimonio suponen el 10,6% del PIB (también por debajo del 13,2% de media en la UE). Desglosados, los ingresos por el impuesto sobre la renta de las personas físicas ascendieron al 7,8% del PIB (frente al 9,5%) y los de sociedades al 2,5% (frente al 2,7% de media en la UE).
España se mantiene entre los países de la UE con menor presión fiscal pese a que la carga aumentó casi un punto porcentual entre 2017 y 2018 (del 34,7% al 35,4%).
Francia (48,4%), Bélgica (47,2%) y Dinamarca (45,9%) son los países con mayor presión fiscal de la UE. Mas de diez puntos por encima de España. Les siguen Suecia (44,4%), Austria (42,8%), Finlandia (42,4%) e Italia (42%).
En el extremo contrario de la clasificación, Irlanda (23%) es el Estado miembro donde se pagan menos impuestos. La presión fiscal es más de 10 puntos inferior a la de España. Le siguen Rumanía (27,1%), Bulgaria (29,9%), Lituania (30,5%) y Letonia (31,4%).