La etapa final de la carrera por la liberalización ferroviaria ha comenzado. Durante la pasada madrugada, además de Renfe, el operador ferroviario público francés, SNCF; los accionistas de Air Nostrum, ILSA y el fabricante de trenes Talgo presentaron ofertas en firme para participar en la liberalización del transporte de pasajeros por ferrocarril. Un cuarteto del que saldrán los tres operadores que serán los encargados de protagonizar una nueva era en el transporte ferroviario español.
La propuesta de Talgo incluye al grupo turístico Globalia que tendrá inicialmente un peso del 5% en este acuerdo. Ambas compañías, con el apoyo financiero de Trilantic Europe, han presentado, a través de la empresa Motion Rail, su oferta para la obtención de capacidad para operar en el mercado de alta velocidad.
Trilantic Europe es una sociedad de capital riesgo que gestiona un patrimonio de 1.500 millones de euros. Desde 2004, ha invertido en 22 proyectos en Europa. Dos años después se convirtió en socio estratégico de Talgo.
Entre las ausencias en el proceso destacan Globalvía, Alsa o Ferrovial. Estas compañías finalmente no encabezarán ninguna oferta, una circunstancia que no les impide entrar en el proceso más adelante con otro rol.
Según estipula el proceso, los involucrados y Adif tienen hasta el próximo 15 de diciembre para terminar de cuadrar los acuerdos marco que dejarán totalmente configurado este nuevo mercado.
Un mes y medio en el que los ofertantes tienen capacidad de añadir miembros a sus propuestas e incluso fundir ofertas. De esta manera, las próximas seis semanas serán clave para definir cómo quedará finalmente la competencia a Renfe.
La apertura a la competencia del transporte de viajeros a partir de diciembre de 2020 generará inversiones y actividad en el sector por valor de 1.500 millones de euros, según cuantificó el ministro de Fomento en funciones, José Luis Ábalos.
Una inversión que incluirá la compra de los trenes necesarios para cubrir el aumento de servicios previsto tras la liberalización, así como su mantenimiento y la actividad económica adicional que generará este proceso.
Siguientes etapas del proceso
Ahora se inicia el periodo de análisis de las solicitudes presentadas por parte de una comisión de valoración. Este órgano estará integrado por tres equipos de técnicos de Adif, centrados en la evaluación administrativa, financiera y técnica de las solicitudes. Todos sus integrantes deberán firmar compromisos de confidencialidad y declaración de inexistencia de conflictos de interés.
En esta fase de análisis, la documentación recibida se valorará desde cuatro puntos de vista: el cumplimiento administrativo, la capacidad financiera, la capacidad técnica y la compatibilidad entre solicitudes.
Finalmente, está previsto que el consejo de administración de Adif emita, en diciembre, la resolución determinando los candidatos adjudicatarios para establecer acuerdos de capacidad marco. Dicha resolución estará supeditada a la previa comunicación y aprobación de los acuerdos marco por parte de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).
La firma de los acuerdos marco deberá realizarse en un plazo inferior a tres meses a contar desde la resolución de adjudicación de capacidad marco, estando previsto que sea antes del 15 de marzo de 2020.