La transición energética tiene mucho de eléctrica, por lo que ni las compañías ni las comunidades quieren dejar pasar el tren. Baleares y Red Eléctrica de España son reflejo de ello. Tanto es así que, hasta hoy, la compañía cifra en 700 millones de euros la inversión que se ha realizado en enlaces eléctricos en estas islas; el objetivo, no obstante, es invertir 1.400 millones más entre 2021 y 2026, según las previsiones que maneja la eléctrica.
De esos 700 millones hasta hoy, 84 millones de euros han ido a parar al cable que unirá eléctricamente Mallorca y Menorca. Un año después de conseguir la autorización del Consejo de Ministros para este proyecto, este mismo lunes la compañía que preside Jordi Sevilla ha comenzado los trabajos de tendido submarino del cable que unirá eléctricamente las dos islas.
Con capacidad de 100 megavatios (MW), la infraestructura, explica Red Eléctrica, mejorará “de manera decisiva” la seguridad y la calidad del suministro en Menorca, y su puesta en servicio está prevista para el tercer trimestre de 2020. Se trata, así, de evitar apagones como el ocurrido en octubre de 2018 en Menorca, por el que el presidente de Red Eléctrica tendrá que comparecer este jueves ante la Comisión de Economía del Parlament, tras haberlo solicitado el grupo del PP.
La nueva interconexión, además, será necesaria para “hacer posible la transición energética en Baleares”, según ha explicado Ramón Granadino, director de Proyectos de Inversión y Gestión del Transporte de la compañía, durante la presentación del proyecto a periodistas.
Ahorro de 100 millones al año
En concreto, esta inversión pretende, por un lado, reducir los costes de generación, más caros en las islas; por otro, otorgar mayor fiabilidad y seguridad al suministro; y, por último, reducir las emisiones haciendo posible un mix energético con mayor presencia de renovables, una cifra que es menor en las islas que en la Península.
Según los cálculos de Red Eléctrica, la entrada en servicio del conjunto de enlaces de Baleares (la conexión entre la Península y Mallorca, la de Mallorca e Ibiza, la de Ibiza y Formentera y la nueva entre Mallorca y Menorca) supondrá un ahorro económico al sistema eléctrico de cerca de 100 millones de euros al año.
La próxima semana, el barco cablero Skagerrak, de la compañía noruega Nexans, será quien comience el tendido submarino del nuevo cable en Cala en Bosc (Ciudadela, Menorca); unos trabajos que terminarán un semana más tarde en Cala Mesquida (Capdepera, Mallorca).
Hasta 1.400 millones de inversión
Más allá de este proyecto, Red Eléctrica prevé incluir en la planificación 2021-2026 entre 1.200 y 1.400 millones de euros de inversión en el desarrollo de enlaces en el archipiélago balear.
De esta cifra, según los datos facilitados por la compañía, unos 1.000 millones corresponden al segundo cable entre la Península y Mallorca, 100 millones al tercer cable entre Mallorca e Ibiza y 85 millones al segundo cable entre Mallorca y Menorca.