Los profesionales del turismo de negocios elogian continuamente las virtudes de España a la hora de albergar todo tipo de congresos y reuniones empresariales. Pero, también, todos coinciden en que todavía le falta una cosa para situarse entre los destinos más importantes para este tipo de turismo: nuevas instalaciones con capacidad para albergar a grupos de más de 2.000 personas.

Sobre este asunto, la directora para España de Meetings and Events de American Express Global Business Travel, Valeria Juste, tiene mucho que decir e incluso una solución que beneficiaría a todos. Y es que para ella “debería haber un acuerdo público-privado” para invertir en nuevas infraestructuras y para albergar en España congresos multitudinarios.

Para Juste “la inversión no debe recaer únicamente en el sector privado” y por ello considera importante “trabajar conjuntamente con ciudades, con destinos y con instituciones para que España pueda albergar congresos con grupos de más de 2.000 personas”.

Ya con eso, nuestro país mejoraría los datos de crecimiento en este segmento, que para el 2020 se prevé que sea de un 2,4% más que este año en lo que se refiere a reuniones internas y “entre un 1,9% y un 2,6% en la parte de incentivos y eventos puros”.



Cifras “bastante positivas” a pesar de que algunos elementos como “el brexit y la guerra comercial entre Estados Unidos y China” pueda afectar en los mercados. Y, posiblemente, también Barcelona, aunque aquí, como explica Juste, “es muy pronto para hacer una valoración de lo que puede pasar”.

Nuevas tendencias

Independientemente de ello, las empresas trabajan para que el sector siga al alza, tanto en España como en otros países. Lo hacen cambiando su modus operandi y adaptándose a las necesidades. 

“El segmento de meetings and events evoluciona muy rápido, en todos los mercados y en muchísimas áreas, lo cual obliga a las empresas a moverse a una velocidad de rayo” para adaptarse a las nuevas necesidades de los clientes, explica Juste.

¿Y cuáles son esas nuevas necesidades? Primero, enumera la directora para España de Meetings and Events de American Express Global Business Travel, es que cada vez más las empresas ponen el foco en “la personalización, en buscar algo diferente que se adecue a sus gustos personales y en tener una tecnología adecuada a sus necesidades”

“Hay gente dentro de los eventos que quieren que el acto en sí sea más digital y tecnológico y otros que requieren otro tipo de impacto. Con lo cual, todos los eventos que se organizan no se hace para el total de los participantes, sino viendo las necesidades de cada participante individualmente.

El resto, son más dispares. Juste afirma que "depende del tipo de asistente, su edad, sus aficiones… Acudir al evento acompañado, prolongar el tiempo del viaje en el destino para disfrutar de la ciudad solo o en compañía de la familia y crear experiencias para su acompañante son algunas de ellas".

El reto de los organizadores

Ante esto, las empresas organizadoras de este tipo de viaje tienen un importante reto: atender las necesidades de sus clientes de forma individual, algo que consiguen de la mano de la tecnología.

Y hacerlo de forma rápida, porque el sector y las tendencias cambian a un ritmo vertiginoso. De momento, lo consiguen gracias a los datos que poseen de sus clientelas. Además, las herramientas digitales les permiten crear viajes a medida. Actualmente las empresas tienen la “posibilidad de obtener la información con mucha más precisión y rapidez, por lo que las decisiones se toman mucho más deprisa”.