En medio de todos los disturbios del procés y de la huida de algunas empresas a otras regiones, las hay todavía que son valientes y dejan a un lado los asuntos políticos para instalarse en la Ciudad Condal. Una de ellas es LOOM.
La red de coworkings que fundaron Paula y José Almansa hace 12 años se instalará en los próximos meses en la Ciudad Condal con tres nuevos establecimientos, “una apuesta muy importante” para ellos que han llevado a cabo además de por ser "un salto natural", motivados por las características que ofrece la capital catalana ya que “Barcelona es un centro empresarial muy importante y una ciudad que invita al espacio flexible”, además de “la segunda ciudad más grande de España”.
EL ESPAÑOL ha hablado con la cofundadora y CEO de la empresa, Paula Almansa, sobre LOOM, su desembarco en Barcelona, el tipo de clientes que quieren, las empresas que trabajan en sus centros y la alianza que ha firmado con Merlin Properties.
A pesar de iniciar su proceso de expansión, LOOM no tiene “prisa” por asentarse en más ciudades porque no quieren “tomar decisiones alocadas por ir creciendo” en un sector muy copado pero en el que “todavía hay hueco para más espacios”. “Vamos paso a paso, asegurándonos de que las cosas se están haciendo bien” porque esto “no es un sprint” sino “una carrera de fondo”.
De esta forma, Barcelona será la primera ciudad a la que LOOM llevará la esencia que ha enamorado a Merlin Properties y que le ha permitido pasar de 300 "Loomers" a principios de 2019 a superar los 2.200 el próximo año, con 11 espacios entre Madrid y Barcelona. Pero, ¿cual es esa esencia?
Los pilares de LOOM
“Espacios, comunidad y programación”, detalla la cofundadora de LOOM, Paula Almansa, a EL ESPAÑOL. Una programación “en distintos temas que pueden ser más profesionales o humanísticos”; una comunidad en la que los "Loomers" se sienten queridos porque “nos involucramos desde que alguien llama hasta que aterriza aquí"; y un lugar especial en el que “se ofrecen a los clientes muchos servicios de valor añadido” y en el que se cuida hasta el más mínimo detalle, como que haya luz natural, plantas y que esté en un lugar accesible.
Almansa explica que cuando les llega un proyecto, les da muchas vueltas desde el punto de vista del usuario y que usan “metodologías de cocreación para configurar los espacios” porque “50 cabezas piensan mejor que una”.
Además, considera “muy pretencioso coger un plano, crear algo y ya” porque cuentan en todo momento con sus clientes. Es decir, “llamamos a los usuarios y le preguntamos cómo es su lugar ideal de trabajo y dentro de nuestras posibilidades y de lo razonable hacemos aquello que nos ha pedido”.
Diferentes tipos de empresas
En las entrañas de LOOM se encuentran “empresas de lo más variopintas” y heterogéneas. Precisamente, esto es lo que más les gusta, que haya “mucha heterogeneidad en tamaño, en verticales y en fases en los que se encuentra cada proyecto”, ya que estos son para Almansa los ingredientes que más lleva a crear sinergias entre los clientes.
¿Qué tipo de clientes? Almansa prefiere clientes con valores “más que con requisitos”. Es decir, clientes con “responsabilidad, respeto, innovación, sostenibilidad y colaboración, que tengan lo que nosotros llamamos sana ambición de crecimiento”. Es decir, que tengan “interés en crecer pero no a cualquier precio y que quieran aportar ideas a otros proyectos”.
Entonces, en sus instalaciones hay desde pequeñas empresas a grandes corporaciones e proyectos de instituciones públicas ya que la Comunidad de Madrid tiene un proyecto muy grande que está desarrollando en uno de los LOOM que hay en Madrid. Entre los proyectos de grandes empresas, Almansa destaca Newtral y Wondo, la plataforma de movilidad de Ferrovial.
La alianza con Merlin
Esta forma de trabajar no solo ha llevado a la empresa a abrir seis espacios en Madrid y los próximos tres que abrirán sus puertas en Barcelona, sino también a firmar una alianza con una de las inmobiliarias más importantes del Ibex 35: Merlin Properties.
Una alianza que “nos ha permitido acelerar el proceso de crecimiento y tener acceso a clientes corporativos más grandes”, hazañas que han conseguido debido a “la tranquilidad que da a los usuarios tener el apoyo pleno de una empresa del Ibex”.
Y todo eso “sin perder la esencia y alma” de la empresa. Algo que no tienen intención de dejar a un lado porque “ellos ya son corporativos y necesitan a alguien que aporte esa creatividad y flexibilidad al conjunto que ya existe en Merlin”.
Pero crecimiento no es lo único que le aporta Merlin, sino también tener acceso de forma más rápida y fácil a una amplia variedad de espacios y “responder de manera ágil y rápida” a esas necesidades cuando una empresa le pide que le cree una sede al estilo de LOOM fuera de las instalaciones de los coworking, otro de los negocios de la compañía.
Y es que “cuando viene una empresa y nos pide un local para 200 puestos, tenemos que salir a la calle y empezar a rastrear. Sin ellos tardaríamos mucho tiempo en responder. Con el portfolio de Merlin se consigue una respuesta más rápida”.
Pero también desde el punto de vista de la inversión. Almansa explica que “cuando tienes que ir buscando inversores tienes que presentar uno a uno cada historia”, pero “si desde dentro ya te apoyan ese crecimiento” es más fácil.