Repsol ajustará 4.800 millones en sus cuentas para ser cero emisiones netas en 2050
La energética que dirige Imaz incrementa hasta 7.500 MW su objetivo de capacidad de generación de electricidad baja en carbono en 2025.
2 diciembre, 2019 18:29Noticias relacionadas
Repsol será compañía con cero emisiones netas en 2050, ajuste contable mediante. La energética que dirige Josu Jon Imaz ha acordado esta meta durante este lunes en el Consejo de Administración, en el que ha analizado el papel de la compañía en la lucha contra el cambio climático.
Así, Repsol se convierte en la primera de su sector en fijar esta meta que, como ha explicado la compañía, pretende limitar el calentamiento del planeta por debajo de los dos grados centígrados respecto a los niveles preindustriales.
Un reto que quedará recogido en el nuevo plan estratégico de la compañía para el periodo 2021-2025, que presentará el próximo semestre, y en el que se prevé que un 25% del total de las inversiones se destinen a proyectos bajos en carbono.
Para alcanzar el objetivo de cero emisiones netas, Repsol plantea nuevas cifras de reducción de su indicador de intensidad de carbono sobre la base del año 2016: del 10% en 2025, del 20% en 2030 y del 40% en 2040, para avanzar hacia las cero emisiones netas de CO2 en el año 2050.
Según los cálculos de la compañía, y con los avances tecnológicos hoy previsibles, la energética anticipa que se pueda alcanzar al menos el 70% de reducción de emisiones netas para ese año y la compañía se compromete a aplicar las mejores tecnologías para elevar esta cifra, incluyendo la captura, utilización y almacenamiento de CO2.
Adicionalmente, en caso de que ello no fuera suficiente, ha explicado, Repsol compensará emisiones mediante reforestación y otras soluciones climáticas naturales para alcanzar cero emisiones netas en 2050.
Ajuste contable
Como consecuencia de la aplicación de este nuevo escenario, Repsol prevé que, en los estados financieros de 2019, se ajuste el valor contable de algunos activos, con un impacto estimado de unos 4.800 millones de euros después de impuestos.
Según ha apuntado la compañía, este ajuste contable minorará los resultados
específicos de 2019, pero no tendrá efecto en la generación de caja ni afectará a la anunciada propuesta de aumento de retribución a los accionistas.
En este sentido, la generación de caja de las operaciones en 2019, que aumentó un 22% a septiembre respecto al mismo periodo de 2018, permitirá alcanzar una retribución a los accionistas de un euro por acción, formular la propuesta a la próxima Junta General de Accionistas de amortizar un 5% del capital social (adicional a las amortizaciones de las acciones emitidas en los programas de dividendo flexible) y plantear más recompras y amortizaciones de acciones propias cuando los excesos de caja no se apliquen a corto plazo a oportunidades de inversión con la rentabilidad exigida.
Incremento en electricidad
En su afán por aumentar su papel en electricidad, la compañía ha incrementado en 3.000 MW su objetivo de capacidad de generación de electricidad baja en carbono, hasta los 7.500 MW en 2025, e inicia su expansión en otros mercados para convertirse en un actor internacional relevante en energías renovables.
Repsol cuenta en la actualidad con 2.952 MW en operación y 1.083 MW en desarrollo, y el Consejo de Administración ha aprobado nuevas inversiones para incorporar y construir dos proyectos fotovoltaicos y uno eólico por un total de 1.600 MW adicionales. Con estos proyectos, la cartera de generación baja en carbono alcanza los 5.600 MW.
"Papel activo del petróleo"
En el área de Upstream, Repsol ha insistido en que mantendrá como eje estratégico del negocio la flexibilidad, poniendo el foco en la rotación y mejora del portafolio de activos y en la generación de caja.
A su parecer, esta perspectiva se traduce en una estrategia de equilibrio de las reservas de gas y petróleo, "con una visión del gas como energía para la transición energética", y teniendo en cuenta también el papel activo que el petróleo debe jugar en un mundo más descarbonizado.
En los negocios industriales, la compañía aumenta su objetivo de descarbonización, con especial foco en refino, con una reducción adicional de emisiones directas del 25% para 2025. Esta reducción se suma al recorte del 23% de las emisiones de CO2 entre 2010 y 2017.
Asimismo, la petrolera ha hecho público que en 2020 publicará un informe con el análisis del alineamiento en la lucha contra el cambio climático en todas las asociaciones e iniciativas en las que participa, dándose de baja de todas aquellas que antes de la fecha de su publicación no hayan cesado en acciones o mensajes incompatibles contra esta lucha contra el cambio climático.