La factura de la luz cambia en enero: guía para evitar que el precio a final de mes se dispare
La tarifa tendrá discriminación horaria, lo que permitirá al usuario beneficiarse de los momentos en los que producir energía es más barato.
28 diciembre, 2019 03:05Noticias relacionadas
A partir del próximo mes de enero se van a ir introduciendo una serie de cambios en el recibo de la luz que tienen como objetivo permitir que el usuario se pueda beneficiar de los tramos horarios en los que producir energía es más barato. Es decir, otorgar al consumidor el poder de decidir cuándo y cómo quiere gastar electricidad y abaratar así su factura de la luz a final de mes.
Se trata de una modificación que llega a propuesta de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), que va a permitir planificar el consumo eléctrico. De este modo, habrá hasta seis tramos horarios en términos de consumo energético, y otros dos en cuanto a potencia. Es decir, un amplio abanico en el que podremos movernos.
¿Cuánto podríamos llegar a ahorrarnos? Según explica el director de marketing de Powen, Pablo Pérez-Bedmar, es complicado saberlo todavía, aunque hace una estimación: “quienes tienen una tarifa con discriminación horaria en este momento, logran un ahorro de entre el 5% y el 10%, por lo que estimamos que podría acercarse a esa cifra”.
¿Cuáles son los cambios?
La idea es que el día se divida en dos horarios de potencia, uno de día y otro de noche, en lugar de un término fijo durante todo el día. Es decir, que en las horas en las que no estamos en casa podríamos elegir menos potencia que en las horas en las que sí estamos. De este modo, se lograría un cierto ahorro en este campo.
Además, habrá seis tramos horarios diferentes donde el precio de la energía que consumimos variará.
Los tramos horarios
En total serán seis tramos. En función de cada uno de ellos el precio será mayor o menor, por lo que la elección a la hora de -por ejemplo- poner el lavavajillas o la lavadora, será fundamental para lograr los ahorros esperados.
El tramo más barato será aquel que irá desde la medianoche hasta las ocho de la mañana. Los intervalos de precio intermedio van desde las 08:00h a las 10:00h; de 14:00h a 18:00h y de 22:00h a 24:00 horas.
El resto de horas, es decir, las de ‘sol’ que van entre las 10:00h y las 14:00h y desde las 18:00h a las 22:00h son los tramos más caros. Es decir, cuando más caro será utilizar la electricidad. ¿El motivo? Son las horas en donde la industria está funcionando y, por tanto, es cuando mayor demanda energética hay en el sistema.
Todos estos horarios desaparecen el fin de semana y los festivos, ya que durante estos días la tarifa que se aplique será la más barata.
¿Afecta a todos los usuarios?
Desde Powen recuerdan que todos los cambios que se van a producir en el recibo de la luz van a afectar a aquellos consumidores que tengan contratada la tarifa regulada, es decir, el Precio Voluntario para el Pequeño Consumidor. Hablamos de algo más de 11 millones de hogares, según los datos de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).
Aquellos que ya tengan contratada la diferenciación horaria seguirán manteniendo su regulación habitual. Las estimaciones de la CNMC dicen que ya son 15 millones de hogares los que cuentan con una tarifa de este tipo, que permite acogerse a las distintas ofertas que hacen las compañías.
El efecto demanda
La lógica hace pensar que si todos los consumidores decidimos poner la lavadora en los tramos más baratos, la demanda subirá y por lo tanto el precio también. Sin embargo, el responsable de marketing de Powen explica que “es algo que podría pasar”, pero no será algo exagerado. ¿Por qué? “Porque el impacto que tienen los hogares en términos de consumo energético es mucho menor que el de la industria”. Es decir, aunque hay más hogares que industrias, éstos demandan mucha menos energía que cualquier fábrica funcionando.
Cuál es el objetivo de este cambio
De lo que se trata es de trasladar al consumidor la evolución de los precios de la generación de la energía, que tiene ciclos muy claros. Se puede comprobar de forma horaria, y se puede ver claramente que a las tres de la mañana el precio es radicalmente distinto que a la una de la tarde.
Al final, dice Pérez-Bedmar, el objetivo es el de “involucrar” al consumidor para que sea “más consciente” de cuándo consume su energía y sea capaz de aprovechar los picos en los que es más barato consumir energía. Ahora bien, reconoce que es algo que “requerirá de un aprendizaje en el tiempo”.
¿Cómo se va a aplicar?
Los efectos no serán inmediatos, además debes solicitar a tu compañía eléctrica que quieres contratar esta nueva fórmula de tarificación.