El anuncio de la derogación parcial de la reforma laboral de 2012 como parte central del pacto de Gobierno de PSOE y Podemos ha hecho saltar todas las alarmas en el mundo empresarial. EL ESPAÑOL ya adelantó que esta nueva normativa ha generado gran preocupación en la empresa, que considera que frenará la creación de empleo, aumentará la desconfianza entre los inversores y ayudará a profundizar la ralentización económica.
Unos efectos que podrían comenzar a notarse en el mundo empresarial nada más confirmarse la designación de Pedro Sánchez, prevista para la próxima semana. Las fuentes jurídicas y empresariales consultadas por este diario indican que la derogación de la actual norma laboral no solo frenará la contratación y la creación de empleo sino que además generará un aumento de los EREs y de los despidos.
De hecho, estas mismas fuentes indican que muchas empresas han decidido adelantar sus despidos colectivos antes de que esta derogación masiva de artículos de la Ley Laboral encarezca el despido. Fuentes jurídicas han confirmado a este diario que se está notando este movimiento en consultas a los despachos de abogados y en decisiones que están comenzando a tomar sus clientes.
En un contexto de desaceleración y en previsión de que la economía se ralentice en 2020 muchas de estas empresas están barajando también realizar despidos que en otras condiciones no ejecutarían, precisamente para evitar este coste mayor laboral de ejercer despidos después de esta derogación. Una decisión que ya habían comenzado a estudiar tras la firma del acuerdo entre PSOE y Podemos en noviembre, pero que se ha acelerado tras conocerse la semana pasada el contenido del acuerdo.
Aumentan los EREs
Los datos dan la razón a los empresarios. En un contexto de incertidumbre política y económica, los trabajadores afectados por Expedientes de Regulación de Empleo (ERE) crecieron un 56,4% entre enero y octubre -los últimos datos disponibles- si se compara con igual periodo del año anterior.
Estamos hablando de 71.079 despidos de los cuales 24.437 correspondieron a despidos colectivos (un 49% más), 44.697 a suspensión de contrato (71% de crecimiento) y 1.945 a reducción de jornada (-34%). Unas cifras que han ido creciendo a medida que se consolidaba el pacto económico entre PSOE y Podemos.
De esta manera, en junio el aumento de los afectados por los EREs era del 42% hasta los 38.611 afectados, una cifra que ha crecido tras la convocatoria de las segundas elecciones y las perspectivas de la materialización de un pacto de izquierdas.
Los puntos más afectados
El documento firmado por Pedro Sánchez y Pablo Iglesias recoge que se derogará con carácter urgente la posibilidad de despido por absentismo causado por bajas por enfermedad, la limitación al ámbito temporal del convenio colectivo y la prioridad de los convenios de empresa sobre los convenios sectoriales.
También se limitará la subcontratación a servicios especializados ajenos a la actividad principal de la empresa, la capacidad de modificación unilateral de las condiciones del contrato por parte de la empresa y se revisará el el mecanismo de inaplicación de los convenios colectivos, "orientándolo a descuelgue salarial vinculado a causas económicas graves".
"Algunas de las vías de acción que se adelantan en el documento impactarán especialmente en las pymes y entre los autónomos y pueden acabar dando como resultado un aumento de la economía sumergida y menores oportunidades de acceso al mercado laboral", dijeron CEOE y Cepyme sólo 24 horas después de conocerse las medidas.
Para Luis Jiménez-Arellano, especialista en Derecho Laboral del Bufete Mas y Calvet, estas medidas son muy favorecedoras para el trabajador, pero no para el empresario. "Si ellos son quienes crean empleo y riqueza y se les carga de trabas, poco podrán generar. Entre los efectos está que crezca el número de despidos de forma importante debido a que los empresarios no cuentan con el respaldo económico para acometer esta avalancha de modificaciones anunciadas en el ámbito laboral y social".
Pequeñas y medianas empresas
Precisamente las empresas más afectadas serán las pequeñas y las medianas para las que será imposible asumir los nuevos costes de contratación y de despido. De hecho, Jiménez-Arellano advierte que muchas de estas empresas podrían tener que acudir a concurso de acreedores ante la imposibilidad de pagar los nuevos costes laborales que esta derogación establecerá.
Una opinión que comparte la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA). "Una mala gestión en política económica tiene consecuencias directas e inmediatas con caída de empleo, paro y cierres empresariales y eso sí que es un entorno inestable", advirtió ATA en relación al anuncio de la derogación de la reforma laboral.
La federación recordó que los últimos indicadores económicos reflejan que la economía española ya crece a tasas inferiores al 2% y que el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) creció hasta noviembre un 71% menos que en los once primeros meses de 2018.
Subida del SMI
PSOE y Podemos también se comprometieron a subir el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) hasta alcanzar progresivamente el 60% del salario medio en España, esto es, unos 1.200 euros. Hace menos de dos semanas, el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ya consideró que elevar el SMI a mil euros ya era "una barbaridad".
Para los empresarios este tipo de medidas sólo traerán más paro y más economía sumergida. De hecho, los grandes perjudicados con estas medidas son las empleadas del hogar y la agricultura, según los últimos datos. Trabajadores que han pasado a tener contratos de jornada parcial o simplemente se han quedado sin contrato.
Los últimos datos de afiliación a la Seguridad Social muestran cómo algo más de 17.000 personas se han visto afectadas en términos interanuales por la subida del SMI a 900 euros. En concreto, los trabajadores agrarios han visto reducir el número de afiliados en 4.473 personas, mientras que el régimen de empleados de hogar lo ha hecho en algo más de 13.000.
Para el economista Javier Santacruz hay "un movimiento hacia la economía sumergida" por el aumento de costes laborales. El coste de las empresas por trabajador aumentó un 2,2% interanual en el tercer trimestre y se situó en 2.553,62 euros mensuales, en niveles de hace más de una década debido precisamente a la subida del salario mínimo en 2019.
Con esta cifras en la mano no es difícil calcular el impacto económico directo en las empresas con los cambios laborales previstos para 2020. De hecho, todos los expertos consultados coinciden en adelantar que se producirá un importante aumento "de varios puntos".