El magnate mexicano Carlos Slim ha encontrado una nueva apuesta en el mercado inmobiliario español: Quabit. El empresario se ha hecho con un 3,006% del capital de la cotizada, cuyos títulos dan la bienvenida a su nuevo accionista con una subida de más del 5% al cierre que permite a su gráfica confirmar el asalto al euro por acción (1,14 euros).
La documentación remitida por Slim a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) no arroja detalles sobre la operación de compra, tan solo se señala que se produjo “en un mercado regulado” el pasado 24 de diciembre, sesión en la que la bolsa española solo estuvo abierta hasta mediodía por la celebración de la Nochebuena. La firma compradora es más concretamente Control Empresarial de Capitales, una sociedad tenedora de acciones perteneciente al grupo Inversora Carso.
La participación recién estrenada por el empresario mexicano asciende a 4,47 millones de acciones. Este paquete alcanza una valoración de algo más de cinco millones de euros en función de la actual cotización de Quabit y, además, da entrada a Slim en el grupo de inversores de referencia de la inmobiliaria.
A pesar de esta apuesta, se queda por debajo de la que tienen en la compañía inversores como el gestor Francisco García Paramés, que según su última notificación a la CNMV atesora un 5,06% de la compañía a través de sus fondos. La firma Geescoperativo suma un 3,52% y el banco de inversión Julius Baer acumula un 8,7%. El primer accionista de la compañía sigue siendo su presidente, Félix Abánades, con una participación del 20,32%.
Con la nueva apuesta de Slim por el 'ladrillo' español -ya controla un 70,8% de Realia-, Quabit logra sumar su sexta sesión consecutiva por encima del euro por acción, la ansiada frontera que libra a una compañía cotizada de esquivar la especulativa categoría de las conocidas como 'penny stocks'. Recientemente, la compañía anunció su salto al negocio de las cooperativas de vivienda de lujo, un segmento poco explorado en el mercado español.