El Banco de España adapta su operativa diaria para hacer frente al riesgo de contagio por el coronavirus. Para ello, y en aplicación de su plan de continuidad de negocio, se ha recomendado a todos los empleados cuyo trabajo no exija su presencia física en las diferentes sedes de la institución que continúen el desarrollo de sus tareas desde sus domicilios.
El regulador aplicará la medida progresivamente a partir de mañana, que estará vigente durante los próximos quince días, y podrá ser revisada en función de cómo evolucione la extensión del coronavirus.
Desde la institución recuerdan que, en línea con las recomendaciones de las autoridades sanitarias, ya activó hace unos días el protocolo de prevención y protección de los empleados frente al coronavirus, en el que se incluyen medidas como la suspensión total, al menos hasta el 20 de abril, de los viajes de trabajo internacionales a las áreas calificadas de riesgo elevado (China, Corea del Sur, Japón, Singapur y norte de Italia), así como la restricción, salvo causas muy justificadas, de los desplazamientos al resto de países".
También se ha decidido suspender el programa de visitas a los edificios del Banco de España y los eventos con una participación prevista de más de diez personas.
Asimismo, el Banco de España ha adoptado medidas para fortalecer la continuidad de los procesos críticos de negocio ante un escenario de mayor propagación del virus. Con la aplicación de estas medidas, todas las sedes del Banco permanecerán abiertas y prestando los servicios habituales al público.