La cuarta reunión de mediación entre la dirección de Nissan y los sindicatos por el ERE que afecta a más de 2.000 empleados de las plantas catalanas del fabricante nipón. Termina como las anteriores, sin acuerdo, pero con menos tiempo de negociación puesto que el periodo de consultas termina el 30 de julio.
En un comunicado este jueves, la firma automovilística ha reiterado la urgencia de avanzar en las negociaciones y su voluntad de colaborar activamente en la búsqueda de alternativas que puedan minimizar el impacto que el plan de transformación global de Nissan tiene para los centros de Cataluña, pero dentro del marco legal planteado.
De la misma manera, ha insistido en la importancia de acordar condiciones que permitan ganar tiempo para valorar alternativas y ha recordado que hasta la fecha no se ha confirmado opción viable alguna como alternativa de reindustrialización.
También ha comunicado a la representación de los trabajadores su intención de buscar "términos de acuerdo" en la elaboración de una propuesta conjunta de plan social para tres colectivos de empleados. Estos, según edad y antigüedad, son: los nacidos antes de 31 de diciembre de 1966; los nacidos entre enero de 1967 y diciembre de 1970, y el resto de empleados menores de 50 años.
Los empleados hablan de "intransigencia"
Por su parte, los comités de empresa insiste en que "ha quedado patente que Nissan Motor Ibérica tiene beneficios aún y es más competitiva que otras plantas de la alianza Renault-Nissan-Mitsibishi a las que se les está dando asignación de vehículos y viabilidad". Por tanto, lamenta que "queda demostrado que el cierre no tiene otra causa que una decisión política, o sea porque les ha dado la gana".
Se ha reafirmado en una posición clara: la empresa se está equivocando en el orden de la negociación. Para él, primero hay que hablar de salvar los empleos, ya sea en el marco de la alianza (ven en Renault su tabla de salvación) o mediante una industrialización.
Según los empleados de las plantas catalanas de Nissan, para esto hace falta tiempo, sí, pero "también relajar el marco de conflictividad y eso no se puede producir con un ERE de cierre encima de la mesa".
Los comités de empresa han vuelto a apelar a la responsabilidad y al diálogo para darle una salida lógica a este conflicto, pero de momento "sólo nos hemos encontrado un muro, en que lo único que viene escrito es la palabra amenaza", indican en su último comunicado.
Mientras tanto, los empleados de la planta de Montcada i Reixac mantienen la huelga indefinida que iniciaron el pasado 4 de mayo, con lo que los pedidos de la pick-up de Mercedes-Benz no pueden entregarse.
De ahí que el responsable de las operaciones industriales de Nissan Motor Ibérica (NMISA) y vicepresidente ejecutivo de Nissan en Rusia, Frank Torres, planteara a los sindicatos extender la fecha de cierre de las plantas catalanas hasta finales de junio de 2021 a cambio de cumplir con estos compromisos.