El gigante estadounidense de ocio y entretenimiento The Walt Disney Company, que hace un año ya había visto desplomarse su negocio en España, contabilizó unas pérdidas netas atribuidas de 4.721 millones de dólares (3.989 millones de euros) en su tercer trimestre fiscal, finalizado el 27 de junio, frente a las ganancias de 1.760 millones de dólares (1.487 millones de euros) registradas en el mismo periodo del año anterior, según informó la empresa.
Los números rojos se han debido al impacto del Covid-19 en los negocios de la compañía más expuestos a las restricciones, como los parques de atracciones o los estrenos cinematográficos. En el trimestre, los ingresos totales cayeron un 42%, hasta 11.779 millones de dólares (9.953 millones de euros).
Por segmentos de negocio, la división de canales de televisión descendió un 2%, hasta 6.562 millones de dólares (5.545 millones de euros), mientras que las operaciones internacionales y el negocio de servicios de suscripción se situó en 3.969 millones de dólares (3.354 millones de euros), un 2% más.
De su lado, los ingresos de la rama de parques de atracciones y venta de productos se desplomó un 85%, hasta 983 millones de dólares (831 millones de euros), mientras que la división cinematográfica facturó un 55%, hasta 1.738 millones de dólares (1.469 millones de euros).
Al finalizar el trimestre, Disney contabilizó 57,5 millones de usuarios de su servicio Disney+, lo que supone casi un tercio de los suscriptores con los que cuenta Netflix. Asimismo, también registró 8,5 millones de usuarios de ESPN+ y otros 35,5 millones de Hulu.
Durante el trimestre, Disney registró 11.728 millones (9.911 millones de euros) de gastos operativos, un 33% menos, mientras que el impacto de la reestructuración y la amortización se disparó hasta 5.047 millones de dólares (4.265 millones de euros).
De esta forma, en el conjunto de los nueve primeros meses de su año fiscal, The Walt Disney Company contabilizó unas pérdidas netas atribuidas de 2.154 millones de dólares (1.820 millones de euros), frente a los beneficios de 10.000 millones (8.451 millones de euros) del mismo periodo del ejercicio anterior. De su lado, la facturación se mantuvo prácticamente estable, en 50.681 millones de dólares (42.828 millones de euros).