Las autoridades estadounidenses han aceptado el principio de acuerdo alcanzado con Daimler y su filial Mercedes-Benz USA para cerrar el caso del software que alteraba las emisiones de 250.000 vehículos diésel en Estados Unidos y que conllevará que el grupo alemán tenga que pagar unos 2.200 millones de dólares (1.861 millones de euros).
Según informó la compañía en un comunicado, con este acuerdo civil se cierran las reclamaciones medioambientales en relación con los controles de las emisiones de 250.000 vehículos diésel en el país, aunque todavía queda pendiente la aprobación última del Tribunal del Distrito de Columbia.
A raíz de este acuerdo, Daimler contempla hacer frente a unos gastos de 1.500 millones de dólares (1.270 millones de euros) en relación con las multas civiles y con los costes relacionados con medidas vinculadas a compensar el impacto sobre el medio ambiente de este caso.
Además, la empresa también estima un impacto de 700 millones de dólares (591 millones de euros) vinculado al coste del acuerdo sobre la demanda colectiva presentada por los clientes afectados en el país, cifra que incluye los honorarios de los abogados (70,4 millones de euros). La compañía también anticipa costes "en la parte media de los tres dígitos" relacionados con otros puntos del acuerdo.
La corporación que dirige Ola Källenius señaló que estos costes tendrán un impacto sobre el flujo de caja libre del negocio industrial de la compañía durante los próximos tres años, aunque el principal efecto se notará en los próximos doce meses.
La multinacional teutona destacó que la aprobación por parte de las autoridades estadounidenses del acuerdo en relación con el software de los 250.000 vehículos diésel representa un "paso importante" hacia la resolución de los casos por el diésel.
Dentro del acuerdo y de forma adicional a las multas civiles, la empresa tendrá que gastar 875 millones de dólares (738,5 millones de euros) en acciones orientadas a mejorar su sistema de cumplimiento y para poner en marcha un programa de modificación de las emisiones de algunos modelos diésel.
"La compañía también llevará a cabo medidas de mitigación en todo el país y además ofrecerá financiación para otras iniciativas de reducción de emisiones de óxidos de nitrógeno (NOx) en el Estado de California", explicó Daimler.