La vuelta al mundo en metro de ACS
El grupo ACS ha participado en proyectos de creación o ampliación de la red de metro de ciudades de todo el mundo.
La movilidad es uno de los principales desafíos a los que se enfrentan las ciudades del siglo XXI. La creciente concentración de la población en los núcleos urbanos y la creación de nuevos desarrollos urbanísticos alejados de los centros históricos o de las zonas de negocios, ha puesto de manifiesto problemas colaterales: el cómo canalizar con eficiencia estos flujos de personas.
Dar respuesta a ello se ha convertido en una prioridad para las principales urbes del planeta. Sobre el papel, afrontar el asunto es muy sencillo porque los objetivos están claros: obtener la máxima eficiencia en sus sistemas de transporte y actualizar estas infraestructuras con la última tecnología. Tanto estas como la construcción de nuevas líneas o estaciones son actuaciones cuya planificación se anticipa a la demanda futura.
Para ello hacen falta recursos. Pero también experiencia para pensar las fórmulas más óptimas para cada lugar en base a sus necesidades específicas, su geografía o su uso. Y es en este punto donde ACS se posiciona como una de las empresas más competitivas del planeta, con proyectos en todos los continentes en los que su trabajo ha ayudado a hacer mejores ciudades de la talla de Nueva York, Londres, Hong Kong, Sydney y, en España, Madrid y Barcelona, entre otras.
Europa: Crossrail, la conexión que le faltaba a Londres
Entre estas obras de gran magnitud, una de las más representativas es la llamada ‘Crossrail’, en Londres. Se trata de una puerta al futuro de la movilidad para una de las ciudades más concurridas y congestionadas de Europa, ya que consiste en construir desde cero una línea rápida de metro ligero que la cruza de este a oeste.
Aunque la capital británica posee el metro más antiguo del mundo y su red es igualmente una de las más extensas del planeta, la conexión ferroviaria entre sus dos extremos no existía hasta la fecha. Y para hacerla realidad, la filial de ACS Dragados UK ha construido dos túneles gemelos de 11,9 kilómetros de longitud que, en principio, estarán dando servicio a comienzos de 2022.
Otra de las obras singulares que se ha adjudicado ACS en Europa se sitúa en Praga. Allí, la filial alemana Hochtief trabajará en la ampliación del metro de la capital checa. Se trata de una obra de 540 millones de euros que consiste en la construcción de dos estaciones a 33 metros de profundidad y un tramo de túnel de 1,2 kilómetros.
Estos proyectos se suman a los que el Grupo ACS ha desarrollado en el pasado en otras grandes ciudades europeas como Copenhague, Viena o Atenas. El carácter internacional de la compañía explica que el 92% de su cartera se sitúe en el extranjero, si bien en España también ha llevado a cabo actuaciones en Sevilla, participando en la construcción de su única línea de metro; en Madrid, ampliando líneas ya existentes; o en Barcelona, construyendo tramos de la línea 9.
OCEANÍA: Mercado estratégico
Australia es un país estratégico para ACS, ya que allí localiza el 28% de su cartera y, de hecho, es el país que constituye la segunda fuente de ingresos para el grupo. Actualmente, y a través de CIMIC, ha participado en Sydney en el proyecto de red de transporte público más importante del país, que incluye la construcción y la puesta en marcha de la primera línea de metro automático de la nación.
El concurso de ACS en este proyecto ha supuesto la construcción de varias estaciones, la instalación de sistemas y el mantenimiento y la construcción de túneles. Esto es relevante porque en este proyecto se están haciendo algunos de los túneles más largos de la zona.
En Brisbane, otra de las ciudades más importantes de Australia, se puede ver también un ejemplo de este tipo de obras de gran magnitud. Allí, CIMIC participa en la que se lleva la mayor inversión de infraestructuras de la historia de la región de Queensland: el Cross River Rail, un megaproyecto que incluye la construcción de túneles, nuevas estaciones de metro, remodelación de algunas antiguas y el mantenimiento de todas estas instalaciones.
CIMIC, en consorcio con otras empresas, participará en esas labores y, además, en las instalación de sistemas ferroviarios, señalización y telecomunicaciones tras obtener la adjudicación para estos ámbitos. En total, ACS se embolsará en torno a los 2.200 millones de euros por todas estas actuaciones.
ASIA: Presencia en las principales centros de negocio
En Asia ACS también ha participado en la construcción de infraestructuras relevantes para dos de las ciudades más potentes en el plano comercial y económico del continente. Por ejemplo en Singapur, donde el grupo ha sido protagonista en la creación de líneas de metro.
En Hong Kong la constructora española también ha dejado su sello en el que es el mayor proyecto ferroviario en su historia, que ha consistido en la construcción de una estación subterránea y 300 metros de túnel que, a través de Convention Avenue, presta servicio al centro de convenciones de la pujante ciudad asiática.
AMÉRICA: Contratista de referencia en EEUU y Canadá
Como en el caso de Australia, la mirada de ACS hacia América es muy importante, especialmente a Estados Unidos, donde sitúa hasta el 50% de su cartera de proyectos en la actualidad. Es un mercado en el que el crecimiento y la posición del grupo está plenamente consolidada y donde desarrolla una actividad constante desde 2006, cuando obtuvo el primer contrato en el metro de Nueva York.
Desde entonces, esta ciudad se ha convertido en uno de sus referentes ya que es allí donde emplaza algunos de sus principales contratos. Por ejemplo, en el East Side Access, un gran proyecto ferroviario que une las líneas de Long Island Rial Road de Queens con una nueva terminal en Manhattan bajo la Grand Central Terminal. Concretamente ACS, a través de sus filiales Picone, Schiavone y Dragados USA, se ha encargado de los acabados arquitectónicos, estructurales, mecánicos y eléctricos del intercambiador de pasajeros, además de labores de excavación y construcción de túneles bajo Park Avenue.
La posición como uno de los principales contratistas del país de ACS también se refuerza con otras obras de calado como las que viene desarrollando en Los Ángeles o en Washington.
En Canadá esta labor de la compañía es igualmente intensa. Allí participa en la construcción del metro ligero de Montreal y el de Ottawa. También desarrolla la ampliación del metro de Toronto, una obra valorada en 3.000 millones de euros. A través de su filial Dragados Canadá, y en consorcio con otras empresas, está construyendo 9,2 kilómetros nuevos de metro ligero en Eglinton Crosstown West para articular la conexión con el Aeropuerto Internacional Pearson. El pliego incluye el túnel, siete nuevas estaciones, las vías y los sistemas.
Esta posición también tiene reflejo en América del Sur, donde ACS también está inmerso desde 2014 en uno de los mayores proyectos de infraestructuras de Perú, la obra de la línea 2 del metro de Lima, por valor de 3.900 millones de euros.
Son obras todas ellas que, aunque se desarrollen a miles de kilómetros entre sí, en continentes diferentes y entornos muy distintos, traslucen una ambición común: la de construir las ciudades más eficientes, sostenibles y amables para los ciudadanos que se desplazan por ellas cada día. Obras destinadas a perdurar y a ser útiles para todos.