Aquaer y Genaq hacen caja con la sequía: así es el negocio de obtener agua del aire
Los dispositivos ofrecen desde 20 litros al día para una oficina u hogar hasta 15.000 para abastecer comunidades sin agua potable.
16 septiembre, 2022 03:04Obtener agua del aire es el negocio de Aquaer y Genaq, dos empresas andaluzas que se dedican a la venta de dispositivos que pueden conseguir hasta 20.000 litros en solo 24 horas.
La sequía ha disparado las ventas de ambas firmas, que prevén cerrar 2022 con récord de facturación. "En los últimos meses se han multiplicado los encargos de empresas energéticas y de particulares, sobre todo de personas que se abastecían de pozos que ahora están completamente secos", asegura a EL ESPAÑOL-Invertia Juan Veiga, CEO de Aquaer.
Desde enero hasta septiembre, los encargos han aumentado un 90% en esta empresa sevillana. Un interés que también han percibido en Genaq, que destaca por facilitar el acceso a este líquido a ejércitos de todo el mundo.
Estos dispositivos, conectados a la red eléctrica o con una placa solar, enfrían el aire hasta llegar al punto de condensación y obtener agua. Genaq comenzó su andadura en 2008 con los primeros prototipos y no fue hasta 2017 cuando empezó a surtir a los ejércitos de Estados Unidos, España u Omán.
Vende sus dispositivos en 62 países y el 95% de su facturación se da en el extranjero. Sus principales clientes están en el sector de las emergencias (respuestas a catástrofes naturales o campamentos de refugiados) e industriales (petroleras o minas). Para 2023, se abrirá también a la venta para hogares y oficinas.
Su objetivo es reemplazar al agua embotellada. "Tiene un coste ocho veces inferior al del líquido envasado, para cada litro se precisan de 0,3 kilovatios por hora de energía que, dependiendo del precio de la electricidad, pueden ser unos cinco o seis céntimos aproximadamente", asegura a este periódico el director general, Carlos García.
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"No solo nos demandan por la sequía, también por la contaminación de acuíferos, porque la red de agua potable no sea de calidad o para no generar residuos plásticos", explica.
El funcionamiento de las máquinas de Aquaer es similar al de Genaq, cuyos orígenes se remontan a la otra gran sequía que padeció España. En la década de los 90, el ingeniero gallego Enrique Veiga estaba instalado en Aznalcázar, un pueblo de Sevilla, y desde allí presentó el primer prototipo de este dispositivo.
"Aún tenemos la máquina de 1997, puede obtener 1.500 litros al día y no queremos venderla por su valor sentimental", explica el actual gerente e hijo del fundador.
En el desierto o en comunidades hippies
Este dispositivo es capaz de funcionar en condiciones extremas. "Hasta 50 grados y con un 10% de humedad. Lo hemos instalado hasta en el desierto", asegura Veiga. Eso sí, el clima en el que se obtiene mayor rendimiento es el tropical: con 20.000 litros en solo 24 horas.
Entre su clientela se encuentra una amplia gama, desde empresas mineras a comunidades sin acceso al agua potable. Franceses con una filosofía de vida 'hippie' de "desconexión energética" también reclaman este producto.
"Viven sin suministros oficiales y están como asilados. También nos llama gente con esta filosofía respetuosa con el medioambiente desde Cataluña o Extremadura", explica Veiga.
En cuanto a sus cuentas, esta pyme cerró 2021 con una facturación de dos millones de euros, pero el impacto de la sequía está siendo tal que, según aseguran, despedirá el año con unas ventas de cinco millones de euros. Con sequía o sin ella, seguirán obteniendo agua dulce del océano que hay sobre nosotros.