El consejero delegado de Indra, Ignacio Mataix, ha alertado este martes en Bruselas de la elevada fragmentación del sector de la defensa en Europa en un momento en que la mayor complejidad técnica obliga a grandes inversiones para desarrollar nuevos proyectos, informa Europa Press.
En el marco de la segunda Conferencia Europea de Defensa y Seguridad, Mataix ha defendido la necesidad de crear una verdadera base industrial y tecnológica para la defensa europea que contribuya a corto y largo plazo a las necesidades de las fuerzas armadas de los países miembros.
"Europa necesita invertir más y mejor para tener una seguridad creíble (...) Sin embargo, ninguna nación puede hacerlo sola. Necesitamos crear mecanismos efectivos de cooperación", ha señalado.
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El directivo ha recordado que la cantidad de diferentes sistemas de combate en los ejércitos europeos dificulta su interoperabilidad y ha asegurado que el "crónico" bajo volumen de producción incrementa los costes por unidad en los programas de defensa, informa Europa Press.
Además, ha lamentado que el enfoque de los países centrado en los intereses nacionales dificulta la competitividad de Europa en el mercado y afecta a la estabilidad de la industria y la cantidad de trabajo y personas con capacidades disponibles. En contraposición, Mataix ha reclamado programas de colaboración más ágiles que aceleren la innovación y fortalezcan la cooperación entre socios para que estas alianzas compensen los crecientes costes del desarrollo de nuevos sistemas más sofisticado.
La guerra de Ucrania
Para Mataix, la guerra en Ucrania ha supuesto un "giro tectónico" en la arquitectura de defensa europea, ya que ha demostrado que los conflictos a gran escala son más probables y cercanos de lo que se pensaba.
Así, ha destacado que la incertidumbre no procede únicamente del Este de Europa, sino que ha alertado sobre el incremento de tensiones en Asia-Pacífico con el conflicto entre Taiwán y China.
Por ello, ha llamado a reorientar el Fondo de Defensa Europeo con un aumento de la inversión y un nuevo programa que incentive los desarrollos conjuntos, así como a acelerar el comienzo de los trabajos del FCAS, el programa europeo para el diseño de su nuevo sistema de combate aéreo del que Indra es coordinador industrial de sistemas.
Siguiendo estas fórmulas, Mataix cree que la industria se fortalecerá y generará mejores empleos y más especializados, al tiempo que mejora la soberanía de Europa y su capacidad de proteger a sus ciudadanos.
Asimismo, ha remarcado la necesidad de que la relevancia de la defensa se transmita a la población para que el sector pueda atraer más talento en su competencia por perfiles tecnológicos con las grandes compañías digitales.
En total, Indra coordina cuatro proyectos europeos de defensa y participa en 19 proyectos financiados por el Fondo Europeo de Defensa, la tercera empresa de Europa con mayor implicación.