Allisone, la solución tecnológica para la comunicación de tratamientos odontológicos, aterriza en España con una ronda de financiación de 10 millones de euros participada por el fondo paneuropeo de origen español Samaipata, junto con el fondo francés C4 Ventures.

Su servicio se focaliza en ayudar a los pacientes a “tomar el control de su salud bucal a través de una solución de comunicación dentista-paciente”. La startup gala considera que España es un mercado que está “idealmente posicionado para implementar más tecnología en sus operaciones”. Allison es uno de los pocos software basados en la nube de la industria.

Según datos ofrecidos por la compañía, actualmente cuenta con 1.200 usuarios. Esta tecnología facilita y respalda la lectura de radiografías dentales, lo que brinda un apoyo visual para que el paciente lo entienda sin complicaciones y el médico lo explique fácilmente.

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De este modo, los pacientes podrán visualizar fácilmente sus problemas y ver las lesiones con sus propios ojos, lo que debería incrementar su confianza en el diagnóstico dental y garantizar que continúen con una atención preventiva. “En España, la salud dental puede ser costosa, por lo que, precisamente por eso, se hace imprescindible comprender las razones y los desafíos de cualquier tratamiento antes de pagarlo”, argumentan desde la startup francesa.

José del Barrio, uno de los cofundadores de Samaipata, la define como “una solución desarrollada por y para dentistas”. A su juicio, “la tecnología puede jugar un papel crucial en este sector en los próximos años y Allisone tiene un equipo y producto de referencia para liderar esta transición”.

Expansión internacional

Entre otros avances logrados por Allisone, también se reducen las tareas administrativas, que suelen consumir un valioso tiempo del médico, el cual ahora podría dedicarse exclusivamente a la atención.

Tras su llegada a España, Allisone ya planea nuevas aperturas en Italia, Estados Unidos, Reino Unido y Alemania, previendo llegar a más de 3.000 clientes a final de año.

“Después de ejercer como cirujano dental durante casi diez años, quería abordar los problemas que enfrentamos en nuestra vida diaria”, explica Lionel Elbaz, cofundador y director ejecutivo de Allisone. El interés de estos fondos de capital privado confirma que la gala ha dado con la tecla.

En el caso del español Samaipata, tras fundarse en 2016 por José del Barrio y Eduardo Díez-Hochleitner, ya ha respaldado a 30 compañías europeas a través de dos fondos de inversión que suman más de 150 millones en activos bajo gestión.