Unilever señaló este miércoles que avanza “en su compromiso con el medio ambiente” y sitúa en el centro la estrategia de reducción de plástico a través de tres ejes estratégicos: ‘No plástico, Mejor plástico y Menos plástico’.
Coincidiendo con el Día Mundial del Reciclaje, la compañía anunció “los logros” alcanzados para cumplir con sus objetivos para 2025 que materializan el compromiso de reducir, reutilizar y reciclar el uso de plástico, según recoge Servimedia.
Desde el inicio de la estrategia ‘Unilever Compass’, la hoja de ruta que sitúa la sostenibilidad en el eje central del negocio, la empresa de gran consumo ha logrado que el 55% de sus envases de plástico ya sean reutilizables, un 2% más que el pasado año, y planea reducir el 50% de plástico virgen para 2025.
“Los compromisos de Compass son una pieza fundamental en el propósito de la compañía: convertir la vida sostenible en un imprescindible, y ayudar a construir un futuro mejor cada día. A través de la reformulación de ingredientes y concentración de producto, así como la innovación de los envases, hemos logrado reducir el uso del plástico en todas las marcas con las que trabajamos”, declaró Ana Palencia, directora de Comunicación y Sostenibilidad en Unilever España.
En este sentido, la compañía de gran consumo ha establecido estos tres ejes relacionados con la reducción, eliminación y mejora del plástico, uno de los materiales más utilizados en los envases de productos y, al mismo tiempo, más contaminantes para el planeta.
Innovación
Desde la compañía se realiza un especial hincapié en la aplicación de la innovación, teniendo siempre en cuenta factores como las necesidades de los consumidores y la protección del planeta.
Asimismo, la compañía ha establecido diversas alianzas con entidades clave como Ecoembes y Ceflex, en el marco de la Agenda 2030, cumpliendo el objetivo 17, alianzas para lograr los objetivos.
La finalidad de este primer eje se basa en optimizar el plástico reciclado y mejorar también la reciclabilidad de los envases. Para ello, se contemplan tanto el reciclado físico como químico, ambos necesarios para el desarrollo y la continuidad de la economía circular y evitar así el uso de los combustibles fósiles que incorporan mayor cantidad de C02 a la atmósfera. En el proceso del reciclado químico se despolimerizan los plásticos y se obtiene la sustancia purificada denominada ‘take oil’, muy utilizada para desarrollar plásticos reciclados de la calidad del plástico virgen.
Un ejemplo de ello sería Magnum, marca de helados perteneciente a Frigo, que marcó un hito al ser el primer helado en usar este 100% plástico reciclado químicamente de calidad alimentaria desde 2019 en España.
Otras alternativas planteadas para la mejora del plástico no están únicamente basadas en crear nuevos tipos de plástico reciclado, sino en implementar soluciones en los procesos de reciclaje físicos.
Tal es el caso de la línea de productos de Personal Care de Unilever TRESemmé y la marca de desodorantes masculinos AXE, caracterizados por sus elegantes envases de color negro.
Los envases negros son los más difíciles de detectar en las plantas de reciclaje y, al formar parte de la economía circular, deshacerse de ellos sería contraproducente. Consciente de esta situación, Unilever logró desarrollar un pigmento negro totalmente detectable para los escáneres de las máquinas de reciclado. Esto significa que alrededor de otras 2.500 toneladas de botellas de plástico ahora podrían clasificarse y enviarse para su reciclaje cada año.
Reducir
La segunda línea estratégica de Unilever se caracteriza por reducir y/o reusar o directamente eliminar, todo aquel plástico que sea innecesario. En esta línea, diversas marcas pertenecientes al área Home Care y Personal Care de Unilever, han optimizado sus envases y productos mediante fórmulas concentradas y envases recargables.
La clásica marca de jabón corporal Moussel, perteneciente a la línea de Personal Care de Unilever, será una de las últimas marcas de la compañía que sacará al mercado un formato de recarga de gel de ducha, que permitirá a la marca ahorrar hasta un 76% de plástico en comparación a la botella estándar.
Por otro lado, los suavizantes Mimosín y los desodorantes Rexona, ambas también de Unilever, han sido capaces de reducir el tamaño de sus envases manteniendo las mismas propiedades gracias sus nuevas fórmulas concentradas.
En el caso de Rexona, el envase de 100ml es tan duradero como el original de 200 ml, siendo además más práctico y adecuado para viajar, mientras que Mimosín aumenta su capacidad de lavados- de 58 a 60- al mismo tiempo que reduce el tamaño de su envase de 1,334 L a 1,2 L.
El eje “no plástico” es la tercera línea estratégica que tiene como finalidad hacer uso de materiales alternativos al plástico como el cristal, cartón y papel. Dove, otra de las marcas insignia de Unilever del área de cuidado personal, ha continuado apostando por la mejora y optimización de sus envases con el propósito de utilizar material 100% reciclado y reutilizable para 2025. De esta manera, Dove sustituirá los envoltorios de plástico de sus pastillas por papel en 2023, eliminando así hasta 1.800t de plástico virgen a nivel mundial.
Por último, otro ejemplo de marcas de la compañía que ha logrado reducir el plástico de sus envases es la marca de salsas, Hellmann’s, que proponen unas alternativas a las monodosis de plástico, un formato muy común en restaurantes. En su lugar, ofrecen una alternativa sostenible en forma mini tarros de cristal que garantizan la máxima higiene en formato individual, así como recargables para el sector de restauración, garantizando además la facilidad de uso para el día a día en las cocinas profesionales.