Ni un solo accionista de Ferrovial ha vendido sus acciones en oposición al traslado de la sede del grupo a Países Bajos.
El valor actual del grupo en Bolsa, cotizando a niveles récord, por encima de los 29 euros por acción, hace que la prestación ofrecida por la compañía a los accionistas que quisieran desvincularse del grupo antes del cambio, 26 euros por título, no merezca la pena.
La multinacional española ha informado que, una vez finalizado el periodo para la comunicación por parte de los accionistas de su deseo de ejercer el derecho de separación, "no nos consta que ninguno lo haya ejercido". Tampoco ningún acreedor ha ejercido su derecho de oposición. La empresa añade que habrá que esperar en todo caso al próximo miércoles para dar el proceso por cerrado formalmente, aunque no se prevén cambios.
Ferrovial cotiza hoy viernes cerca de los 29,6 euros por acción, próxima a su mayor cota, 30,5 euros por título, alcanzada poco antes de que estallara la pandemia por Covid, en marzo de 2020.
El valor en Bolsa del grupo se ha revalorizado un 12% desde que anunciara, el 28 de febrero, su decisión de trasladar la sede de Madrid a Ámsterdam. En el último año, los títulos de Ferrovial se anotan una subida del 27,5%.
En la Junta de Accionistas celebrada por la constructora presidida por Rafael del Pino el pasado 13 de abril, el único accionista relevante que votó en contra de la medida propuesta del cambio de sede fue Leopoldo del Pino.
El presidente de Ferrovial, Rafael del Pino, el pasado 4 de mayo en Madrid.
El hermano del presidente del grupo, no obstante, con el 4,1% del capital, valorado en cerca de 890 millones de euros, no ha vendido sus acciones, una operación que le habría supuesto una pérdida millonaria en comparación con el ingreso que habría obtenido con la venta de su porcentaje a los precios actuales de cotización.
El anuncio de la compañía de su decisión de trasladar su sede fuera de España ha provocado un agrio enfrentamiento entre el Gobierno y la empresa, a la que llegó a advertir, en una carta firmada por el secretario de Estado de Economía, Gonzalo García Andrés, que la medida no obedecía a intereses económicos, lo que podría implicar un castigo fiscal a las plusvalías obtenidas por el cambio.
La multinacional española asegura que la medida obedece a su deseo de tener una mayor presencia y exposición en el mercado estadounidense, y ante las dificultades para poder cotizar a la vez y directamente en España y en Wall Street.
Ferrovial comunicó la pasada semana sus resultados correspondientes al primer trimestre del año, en el que ingresó 1.805 millones de euros, un 11,2% más. El grupo prevé empezar a cotizar en la Bolsa de Ámsterdam antes de agosto y en Estados Unidos antes de fin de año.