El ecosistema de scaleups español está en pleno proceso de maduración, y hoy presenta un terreno fértil en el que estas empresas impulsan de una manera protagonista la transformación de la economía de nuestro país.
La última edición del SouthSummit 2023 puso de manifiesto la resiliencia y vitalidad de este ecosistema en el mercado español frente a otras regiones del mundo. Los indicadores, como el informe de PWC ‘La contribución socioeconómica de South Summit en España’, señalan que el valor del conjunto del ecosistema emprendedor a escala mundial se redujo en un 2,3% en 2022, mientras que en España logró aumentar en un 8,6%, llegando a alcanzar los 93.000 millones de dólares en 2022. Además, y según los resultados del informe de Scaleup Spain Network, en 2022 el impacto (directo e indirecto) en la creación de empleo de las scaleups en España alcanzó los 850.000 empleos.
Entre las claves y fortalezas que los jóvenes emprendedores identifican para el éxito de sus proyectos, el ‘branding’ especializado es uno de los pilares más importantes, tanto para allanar el camino, escalar el negocio como para estimular la progresión de estas compañías.
Emprendedores jóvenes
En este sentido, FutureBrand, consultora estratégica y de marca del grupo McCann, aporta una visión adaptada a este espíritu emprendedor. Por un lado, el enfoque en el largo plazo. Generalmente los fundadores de las scaleups son emprendedores jóvenes que han desarrollado una idea brillante pero necesitan apoyo desde el punto de vista de la marca y la comunicación. Han creado un negocio que funciona y que ha crecido rápido pero se encuentran con una identidad que no está a la altura de lo que son y lo que quieren llegar a ser. El branding puede impulsar los resultados alineando la marca con sus aspiraciones. Trabajar de forma conjunta les ayuda a articular qué representa su marca y para qué está en este mundo, preparándola para que llegue más lejos y sea competitiva a escala internacional.
Por otro lado, la mentalidad emprendedora inherente a esta categoría. En el caso de este ecosistema del emprendimiento, hay que apostar por un enfoque del branding más joven, ágil y disruptivo. Que aborde el diseño de manera estratégica y prepare a las marcas para expandirse y vivir más allá de una interfaz o un logotipo como en el caso de urbanitae o bet&deal. Hoy, algunas de las marcas creadas por la agencia ya están diseñadas con arte generativo, tienen una colección de NFTs en el mercado o apuestan por una forma de remuneración que ha pasado del euro al bitcoin.
Y por último el enfoque en la Cultura. En este sentido, las startups que han logrado convertirse en scaleups, son compañías habitualmente creadas entre amigos, hermanos, compañeros. En una primera fase, es fácil gestionar una Cultura, que es compartida por todos de forma natural. Pero cuando necesitan incorporar talento, resulta más complejo. Es aquí donde la definición de un propósito de marca, unos valores y una personalidad puede funcionar como un imán para atraer y retener a los equipos.
Una de las principales conclusiones de los expertos del sector que las scaleups deben asegurarse de contar con las estructuras, el equipo de trabajo y los procesos correctos para garantizar su éxito en la próxima fase de crecimiento. Y el respaldo de una marca construida a largo plazo puede aportar reconocimiento internacional e incrementar la relevancia entre su público objetivo, contribuyendo significativamente a la creación de valor.