La Fundación Artemisan lamentó este miércoles que durante los últimos años se ha perdido "todo el trabajo de reforestación" realizado durante siglos en España, tanto debido al aumento de incendios en las últimas décadas como a la "reducción drástica y exponencial de las inversiones en reforestación y gestión forestal por parte de las administraciones".
En un comunicado, señaló que en España hay 28 millones de hectáreas de superficie forestal y, desde el año 1991, han ardido 3,96 millones, una cifra de tal magnitud que se entiende mejor al compararse con el esfuerzo de reforestación realizado en España desde 1940 hasta 1995, de un total de 4,13 millones de hectáreas.
De este modo, en los últimos 30 años se han perdido "todos los procesos de transformación de tierras forestales llevados a cabo durante los últimos siglos". De poco sirve, a su juicio, que las Administraciones Públicas incrementan cada año su gasto en medidas de prevención y extinción, mientras que "las inversiones en reforestaciones y gestión forestal se han reducido de manera contundente, pasando de 4,1 millones de hectáreas entre los años 1940 y 1995, a solo 560.000 desde 2001".
Gestión forestal
Según el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, el conjunto de Administraciones españolas invierte anualmente unos 600 millones de euros en extinción de incendios y alrededor de 400 millones en gestión forestal.
Dentro del gasto forestal, el 60% está dedicado a la extinción, algo menos del 20% a la prevención y algo más del 20% al resto de actuaciones. "Tal vez estos porcentajes debieran equilibrarse para potenciar la gestión forestal como medida de prevención", indicó Fundación Artemisan.
"A todo ello hay que sumar que la superficie forestal en la que no se produce ninguna actuación crece 150.000 hectáreas cada año, debido principalmente al abandono del mundo rural y agrícola, lo que convierte a los montes españoles en un auténtico combustible para la generación de grandes incendios forestal que provocan pérdidas incalculables tanto humanas, como económicas y de biodiversidad", añadió.
Para la Fundación Artemisan, es "imprescindible" el desarrollo de un nuevo Plan de Forestal Nacional con unos objetivos de reforestación a diez años con especies menos pirófitas que permitan una mejor defensa frente a los incendios forestales, así como un Plan Hidrográfico Nacional que consiga paliar las deficiencias en materia de agua que hay en España.
Igualmente, la entidad insta a las distintas Administraciones Públicas a permitir, por parte de la Oficina de Cambio Climático, que la reforestación en terrenos no agrícolas y el desarrollo de acciones en materia de prevención de incendios contabilice para la creación de sumideros de carbono, acciones que permitirán incentivar la gestión forestal de los bosques en la propiedad privada.
De la misma manera, apuesta por el desarrollo de planes de ordenación forestal, estableciendo un calendario a diez años, donde todos los montes públicos y privados en España se encuentren bajo la figura de un instrumento de gestión forestal, ya que en la actualidad "solo el 20% de la superficie forestal española está ordenada, así como incentivos que permitan trabajar en estos montes en la prevención de incendios forestales".