En nuestro día a día damos por hecho multitud de servicios sin pararnos a pensar en las tecnologías que los hacen posibles. En el transporte público ocurre, por ejemplo, con los paneles que informan del tiempo que falta para que llegue el autobús o el tren o con los sistemas de ticketing que nos permiten validar el viaje con una simple aproximación de tarjeta. Las tecnologías que hacen esto posible facilitan nuestro día a día y permiten el funcionamiento fluido de un servicio esencial.
Detrás de muchas de estas tecnologías está la empresa española GMV que, con cuatro décadas de experiencia, ha logrado situarse como un claro referente en soluciones tecnológicas aplicadas a todo tipo de sectores, entre ellos el transporte, gracias a sus sistemas inteligentes de transporte (ITS). La compañía, que celebra este año su 40 aniversario, lleva más de 25 años desarrollando soluciones tecnológicas para el sector del transporte, tanto en España como a nivel internacional.
Tecnología española que llega hasta Nueva York
Desde la sede central de GMV en Tres Cantos (Madrid) y especialmente desde sus otras sedes por España, como la que la compañía posee en Boecillo (Valladolid) han surgido soluciones tecnológicas que llegan a multitud de rincones en todo el mundo. Uno de los más recientes ha sido Nueva York, donde la compañía acaba de ser seleccionada para actualizar la plataforma tecnológica del transporte público del condado de Westchester.
Con más de un millón de habitantes, el condado de Westchester es uno de los suburbios más importantes de la ciudad de Nueva York, a la que está conectada por multitud de vías ferroviarias y líneas de autobús. Y, a partir de ahora, su sistema de transporte de autobús, el denominado Bee-Line, contará con tecnología española para optimizar las operaciones y enriquecer la experiencia de los usuarios.
La compañía implementará en los 325 autobuses de la Bee-Line su sistema GMV Hub, un robusto ordenador de a bordo diseñado específicamente para el transporte público. Este dispositivo permitirá controlar el posicionamiento de los autobuses, los contadores de pasajeros, la pantalla táctil del operador del autobús, los anuncios de cada parada o las cámaras de seguridad. Gracias a la tecnología multifuncional de este sistema se reducirá significativamente los costes del equipamiento a bordo de cada vehículo.
Además de equipar cada autobús con dicho sistema, la compañía también instalará un software nativo en la nube con diversas aplicaciones que mejorarán próximamente la visibilidad y el control de todas las operaciones en los autobuses del condado de Westchester.
Este conjunto de aplicaciones permite el intercambio de datos en tiempo real y abarca funciones clave, como la planificación y programación de las rutas, optimizando itinerarios y horarios para una mayor eficiencia; el despacho, que permite al personal del centro de control supervisar la flota y actuar rápidamente para mantener el flujo de autobuses; la gestión de cocheras, que organiza el movimiento de autobuses para garantizar que estén listos para el servicio y, por último, la gestión de vídeo, que permite la visualización de manera remota y en directo, así como el almacenamiento seguro de imágenes de las cámaras de seguridad de los autobuses.
Mediante estas tecnologías, GMV simplifica la interoperabilidad entre departamentos y empresas, integrando diferentes productos en una solución única que permite el trabajo coordinado en la nube. Este sistema se ha venido desarrollando en los últimos años para el mercado europeo y ya se ha desplegado con éxito en Barcelona, Baix Llobregat, Galicia o Granada y ahora, gracias a este proyecto, GMV busca situarlo como referente también en Estados Unidos. "Este contrato afianza nuestra presencia en EE. UU., donde GMV busca consolidarse y continuar expandiéndose para proporcionar tecnología de vanguardia en cada vez más lugares", destaca Miguel Ángel Martínez Olagüe, director general de Sistemas Inteligentes de Transporte en GMV.
Nueva York no ha sido, sin embargo, el primer contrato importante de GMV en Estados Unidos. En 2023, sin ir más lejos, la compañía fue adjudicataria de un contrato de 26 millones de dólares en Houston para mejorar la experiencia de los usuarios de transporte público mediante un ambicioso proyecto de señalización con hasta 3000 carteles digitales ubicados en centros de tránsito, andenes de tren y paradas de autobús. "GMV tiene una posición de liderazgo a nivel internacional y nuestros desarrollos tecnológicos ya han llegado a lugares como Estados Unidos, Australia, Polonia, Malasia, Marruecos, Taiwán o Filipinas", señala Martínez Olagüe.
A la vanguardia en soluciones tecnológicas
GMV comenzó en 1984 con un pequeño grupo de ingenieros que logró un contrato de la Agencia Europea del Espacio (ESA). En una década ya estaba participando en las principales misiones espaciales de la Agencia y continuó creciendo hasta que en 2004 abrió su primera filial internacional, precisamente en Estados Unidos.
Hoy en día la compañía dispone de filiales en doce países (España, Alemania, EE. UU., Francia, Polonia, Portugal, Rumanía, Reino Unido, Países Bajos, Bélgica, Malasia y Colombia) y cuenta con clientes en los cinco continentes. De hecho, el 75% de su facturación procede de proyectos internacionales.
A lo largo de sus 40 años de historia, la compañía se ha consolidado en la vanguardia tecnológica de sectores como transporte, espacio, defensa y seguridad, ciberseguridad o automoción. La innovación ha sido un pilar de crecimiento esencial en GMV, de ahí que destine el 10% de su facturación anual a actividades de I+D, una inversión que le ha permitido convertirse en el principal proveedor de sistemas de mando y control para el Ejército de Tierra español y jugar un papel clave en el desarrollo de los sistemas de navegación por satélite europeos EGNOS y Galileo.
El trabajo de GMV muestra la capacidad de innovación de esta empresa española en el ámbito global, con una trayectoria marcada por la necesidad de adaptación a las exigencias cambiantes de aquellos sectores en los que desarrolla su actividad.