Nuevo golpe para la banca española (y europea) en bolsa. El mes de mayo ha dejado claro que el intento de recuperación del sector en el mercado era solo un espejismo. De hecho, dos de las entidades que mejor parecían comportarse este año, Santander y BBVA, han echado por tierra la confianza que, hasta hace poco, les habían otorgado los inversores.
En conjunto, los seis bancos que cotizan en el Ibex 35 se dejan, solo en el mes de mayo, 13.557 millones de euros en bolsa, hasta dejar su valor total en 132.046 millones de euros, desde los 145.603 millones que sumaban a cierre de abril. Una caída que responde a tres cuestiones, según los expertos: la evidencia cada vez más clara de que el Banco Central Europeo (BCE) no va a subir los tipos de interés este año; la caída del beneficio del primer trimestre y la perspectiva de que 2019 sea un año aciago para el negocio bancario y, por último, la nueva amenaza que supone Italia para un sector cargado en sus carteras de deuda del país transalpino.
Como es evidente, en el transfondo de estos tres factores -especialmente en el rechazo de Italia a cumplir con Bruselas- está el miedo a la desaceleración global, y el castigo que los valores bancarios sufren cuando estos temores resurgen en el mercado.
PÉRDIDA DE VALOR EN BOLSA
Banco Santander es el peor parado de esta situación con una caída del 12% en mayo. De hecho, el valor está a punto de entrar en pérdidas en el año, con un desplome de su capitalización de 8.826 millones hasta los 63.946 millones de euros.
La entidad comandada por Ana Botín ha logrado aguantar in extremis, y al cierre de la sesión, los 4 euros por acción, una cota que no pierde desde el pasado 7 de febrero (sesión que despidió en 3,994 euros). Sin embargo, tanto el martes como el miércoles, los títulos de la entidad cántabra han tocado mínimos intradía por debajo de ese nivel. .
En términos de capitalización, BBVA acompaña al Santander entre los mayores damnificados del parqué nacional. La entidad se deja 2.933 millones de euros de capitalización en mayo, hasta los 33.134 millones, tras caer un 8,13% en el periodo hasta los 4,97 euros que ronda actualmente, de nuevo por debajo delos 5 euros que al cierre del martes también conservó ‘in extremis’. Aun así, el banco presidido por Carlos Torres es el único que, junto a las tímidas ganancias de Sabadell, mantiene un saldo positivo en bolsa en el año, con subidas del 7,3%.
Bankia también destaca en la parte de las pérdidas con una caída del 9,5% en mayo que ha provocado la ‘fuga’ de 727 millones de euros del valor en bolsa de la entidad en el periodo. A cierre de abril, su capitalización ascendía a 7.602 millones de euros. Ahora, la cifra es de 6.874 millones. Una caída que vuelve a poner en duda la capacidad del FROB para vender paquetes del banco con el objetivo de recuperar las ayudas públicas recibidas. La entidad es, además, la más bajista en el conjunto del año, con pérdidas acumuladas del 12%.
SABADELL, BANKINTER Y CAIXABANK
Dentro de la banca mediana, sorprende el comportamiento del Sabadell. La entidad había logrado retomar la confianza de los inversores tras un 2018 desastroso por la crisis de su filial británica TSB. Sin embargo, el valor se ha visto arrastrado en mayo por el castigo al conjunto del sector, con caídas del 2% que le llevan a perder 168 millones de capitalización y quedarse plano en el año, poniendo en riesgo, de nuevo, el euro por acción.
Bankinter también está sufriendo para recuperar los 7 euros por acción en los que la entidad despidió 2018. El banco dirigido por María Dolores Dancausa pierde un 6,8% en el año, tras la caída del 8% que sus títulos están sufriendo en mayo, con una pérdida de 511 millones de capitalización bursátil.
Dentro de los grandes del sector, también destaca CaixaBank. La entidad, que es la segunda peor en bolsa en el año con pérdidas acumuladas del 9,3%, ha resistido algo mejor que el resto el envite de mayo limitando la caída al 2,2%, perdiendo 388 millones de capitalización.