El ex consejero delegado del BBVA Ángel Cano no ha comparecido hoy finalmente para declarar como investigado en el caso Villarejo tras comunicar que estos días se encuentra de viaje en el extranjero, por lo que el juez Manuel García Castellón ha decidido citarle de nuevo para el próximo jueves 11 de julio.
Ricardo Gómez Barredo, miembro del Consejo de Administración de Garanti (sociedad participada por el BBVA), otro de los investigados citados hoy, también ha anunciado que se encuentra en el extranjero, por lo que el juez le ha vuelto a citar el mismo día que a Cano, según han informado fuentes jurídicas.
Además de Cano, esta mañana estaba también citado como investigado en la pieza en la que se investiga el supuesto espionaje que el BBVA encargó al excomisario, Ignacio Pérez Caballero Martínez, director de Red de Banca Comercial del BBVA, quien se ha acogido a su derecho a no declarar, según han informado fuentes jurídicas.
Al haber anunciado Gómez Barredo su incomparecencia esta tarde, a partir de las 16.15 comparecerán los otros dos imputados que habían sido también citados a esa hora: Javier Malagón Navas, performance management & control, & head of data en Finanzas y Antonio J. Bejar González, presidente de Distrito Castellana Norte (sociedad en la que el banco tiene participación).
Entre hoy y mañana han sido citados nueve investigados por esta causa, la mayor parte altos cargos actuales o pasados del banco. Todos ellos están siendo investigados por delitos de cohecho activo y descubrimiento y revelación de secretos.
El viernes han sido citados el exjefe de Seguridad del banco, Julio Corrochano; Inés Díaz Ochagavia, que le sustituyó como directora de Seguridad Corporativa; Nazario Campo Campuzano, jefe del equipo de Seguridad, y el socio de Villarejo, el abogado Rafael Redondo.
En esta pieza, que permanece bajo secreto, el juez investiga la relación del BBVA con Cenyt, la empresa de Villarejo, que se cree comenzó en 2004, cuando Sacyr pretendía tomar el control de la entidad. Según la investigación el banco contrató los servicios de Cenyt por 5 millones de euros.
El nombre de Corrochano aparece en contratos suscritos con Cenyt, y en intervenciones telefónicas consta una conversación suya en la que asegura que el "presi" le llamaba cada diez o quince días, en alusión a Francisco González, conocido como FG, lo que supondría que estaba al corriente de esta operación de espionaje.
Exministros, periodistas, empresarios y banqueros, entre otros, fueron objeto de este espionaje para el que Villarejo se habría servido de la ayuda, entre otros, de Corrochano. Los investigadores calculan que llegaron a ser intervenidas más de 15.000 llamadas de miembros del Gobierno, empresarios, instituciones y periodistas.