El ajuste contable aplicado en su filial británica, anunciado ya a finales de septiembre, provoca el esperado impacto en las cuentas trimestrales de Banco Santander. Hasta septiembre, el banco cántabro gana 3.732 millones de euros, un 35% menos que en el mismo periodo de 2018. Entre julio y septiembre, las ganancias alcanzan los 501 millones, por encima de los 455 millones esperados por el mercado, pero claramente por debajo de los 1.990 millones del tercer trimestre de 2018.
Estos números se han traducido en caídas más y más profundas para las acciones del Santander conforme ha avanzado la sesión. Al cierre, un retroceso del 4,06%, el más abultado de todo el Ibex 35, hasta los 3,709 eurosLos analistas técnicos que siguen el valor habían fijado en los 4 euros por acción una resistencia clave para dirimir su futuro más inmediato en el parqué, una cota de la que se ha alejado con fuerza este miércoles.
La causa de estas brechas se encuentran en Reino Unido y los costes de reestructuración de la entidad presidida por Ana Botín. Como explica el banco, esas cifras se producen "tras dotar 2.448 millones por el ajuste del fondo de comercio de Reino Unido y costes de reestructuración ya anunciados". Y desglosa esta dotación: "El ajuste del fondo de comercio de Reino Unido, anunciado el pasado 24 de septiembre (1.491 millones de euros), así como por una provisión adicional por los seguros de protección de pagos (PPI) en el Reino Unido (103 millones de euros) y otros cargos (40 millones de euros). Esto, además de los cargos por valor de 814 millones anunciados en el primer semestre, principalmente por costes de reestructuración en España y Reino Unido". Sin estas dotaciones, el beneficio hasta septiembre hubiera sido de 6.180 millones y el trimestral, de 2.135 millones, ambos por encima de los registrados el pasado ejercicio.
Según palabras de la presidenta, "hemos conseguido el mayor beneficio ordinario desde hace casi una década a pesar de un entorno difícil, manteniendo las buenas tendencias del primer semestre. Y lo hemos logrado gracias a la fortaleza de nuestro modelo y a la nueva organización regional que anunciamos en abril y que pone en valor la pertenencia al Grupo."
En los nueve primeros meses de 2019, el margen de intereses del banco sube un 4,6%, hasta los 26.442 millones; el margen bruto crece un 2,8%, hasta los 36.902 millones; y el margen neto, un 2,9%, hasta los 19.593 millones.
Hasta septiembre, la rentabilidad sobre el capital (ROE) de la entidad baja hasta el 5,9%, por debajo del 8,2% de hace un año. La ratio de capital total fully loaded sube al 14,68%, desde el 14,58% de septiembre de 2018. La ratio de morosidad mejora hasta el 3,47%, frente al 3,87% de un año antes. Y la de eficiencia se mantiene en el 46,9% de septiembre del año pasado.
El banco de Europa y América con mayor número de clientes
El banco aumentó en casi seis millones el número de clientes en los últimos doce meses, y ya atiende a 144 millones, más que cualquier otro banco de Europa y América. El número de clientes vinculados, aquellos que usan Santander como banco principal, aumentó un 10% en los últimos doce meses, hasta 21 millones, mientras que el crédito y los recursos de clientes crecieron un 4% y un 6%, respectivamente, en euros constantes.
El rápido crecimiento en la adopción de productos y servicios digitales continuó: el número de clientes que usan banca por internet o móvil aumentó en 6,1 millones en los últimos doce meses, hasta 36,2 millones, es decir, el 51% de los clientes activos. Durante el trimestre, el Grupo anunció el lanzamiento de Openbank en Alemania, comenzó una prueba piloto de Superdigital en Chile y acometió nuevas inversiones a través de su fondo de capital emprendedor Santander InnoVentures en áreas como la verificación de identidad, las plataformas de deuda digital y blockchain para la emisión de valores. Además, en septiembre, el banco lanzó el primer bono blockchain de principio a fin del mundo.
En la nota enviada a la CNMV también dedican un apartado al dividendo. El grupo confirmó en septiembre un primer dividendo contra los resultados de 2019 por un importe de 0,10 euros por acción, que abonará a partir del 1 de noviembre de 2019, y confirmó su intención de mantener un porcentaje del beneficio atribuido ordinario que se dedica al dividendo (payout) de entre el 40% y el 50%, y que la proporción del dividendo en efectivo sea al menos de la misma cuantía que el año pasado.
Brasil, el mercado que más aportó
Por mercados, Europa contribuyó un 46% al beneficio ordinario del Grupo; América del Sur, un 38%, y Norteamérica, un 16%. Brasil volvió a ser el país que más aportó, con un 29% del total del beneficio ordinario, seguido de España (15%), Santander Consumer Finance (13%), Reino Unido (10%), México (8%) y EEUU (8%).
En Brasil, el beneficio ordinario fue de 2.249 millones de euros, un 19% más. El margen de intereses aumentó un 6% y los ingresos por comisiones, un 12%. Los costes aumentaron a un ritmo más lento que los ingresos, lo que ayudó a mejorar la ratio de eficiencia hasta el 32%. Como resultado, el RoTE ordinario fue del 22%, frente al 20% en septiembre de 2018. El crédito creció un 8%, con ganancia rentable en cuota de mercado.
El banco continuó siendo el líder en el segmento de automóviles, con una cuota de mercado del 25%. Santander Brasil ha sido pionero en el lanzamiento de una solución que permite el uso de terminales punto de venta con Bluetooth para aprovechar la oferta de Getnet, el negocio de pago con tarjetas, sin tener que adquirir un nuevo terminal.
... Y en España cae el crédito
En España, el beneficio ordinario se situó en 1.185 millones de euros, un 3% más, gracias sobre todo a la caída de los costes, que bajaron un 7% como consecuencia de las eficiencias generadas por la integración del Popular. Tras la migración de todas las oficinas y clientes a la plataforma Santander, el banco está ahora centrado en optimizar la red comercial. El banco aumentó la rentabilidad de todos los segmentos y productos.
El crédito cayó un 6% debido al desapalancamiento de grandes empresas y a un descenso en el stock de hipotecas. El crédito al consumo aumentó un 24% en el año gracias a los preconcedidos y las contrataciones digitales. Los depósitos a la vista se incrementaron en 12.780 millones de euros. Los clientes digitales aumentaron un 20%, hasta 4,7 millones.