El consejero delegado de Banco Sabadell, Jaume Guardiola, confirma que la reducción de costes va a ser uno de los ejes estratégicos del banco en los próximos trimestres. En concreto, la idea es que el plan de ajustes previstos para su filial británica TSB con el que espera un ahorro de 100 millones anuales, se lleve a cabo en solo dos años. Es decir, terminar 2021 con todo el proceso de recortes terminado.
"Para ser más claros en cuanto a los números concretos tenemos que esperar a la próxima presentación de resultados", ha indicado el directivo.
Durante su intervención en el XI Encuentro del Sector Financiero organizado por Expansión y KPMG, Guardiola ha explicado que acudir a una fusión para recortar costes se hace evidente en los modelos "muy retail", con clientes que generan pocos ingresos unitarios, si bien Sabadell opera en un mundo "más de empresas", donde los márgenes unitarios son más elevados y la escala "no es tan importante".
En este sentido, ha asegurado que el banco está "totalmente embarcado" en su proyecto de gestión, que contempla una aceleración del plan de reducción de costes y que ofrece "una capacidad clara de crear valor para el accionista".
Para Guardiola, otra de las claves para que el sector vuelva a ser atractivo para accionistas e inversores, está en recuperar los dividendos con cargo a 2020. Aunque no ha detallado la política de retribuciones que llevará el banco a partir del próximo año, Guardiola ha evidenciado la necesidad del sector de reducir el coste de capital, "porque no puede ser que seamos poco invertibles para los fondos y los gestores de activos, pues eso acaba estrangulando el crecimiento económico".
En este sentido, considera que la recuperación de los dividendos es un punto clave. "Lo lógico es que las políticas de dividendos sean prudentes y creo que en ese entorno nos vamos a alinear todos", ha indicado.
En cuanto a los resultados del segundo semestre de 2020, el consejero delegado de Banco Sabadell ha apuntado que la actividad convergerá hacia la normalidad, pero todavía sin alcanzar los niveles de hace un año.
Eso sí, el peor trimestre del año, desde todos los puntos de vista, ha sido el segundo, con el pico de provisiones este año, mientras que la morosidad "se va a comportar mejor de lo esperado" y su pico se verá en 2021, ha afirmado.