La financiación sostenible define un tipo de financiación relativamente reciente, aquella cuyos recursos se destinan a proyectos con un claro beneficio medioambiental y social. La sostenibilidad es un tema en boca de todos, pero para cumplir metas reales para a la protección del medioambiente se necesita el apoyo a acciones concretas.
En los últimos años, las entidades financieras han ampliado su oferta de financiación sostenible y son muchas las empresas que se han sumado a este tipo de apoyo, ya que, además de la creciente concienciación acerca de la protección del medio ambiente, ofrece unas condiciones más favorables en lo relativo a los plazos de pago e intereses reducidos.
Entre ellas, CaixaBank, que ha cerrado a lo largo de este año 52 operaciones de financiación sostenible por valor de 12.000 millones de euros, la mayor cifra alcanzada por la entidad hasta el momento en esta área. Supone, respecto al año anterior, un aumento del 79% en préstamos y productos transaccionales y un incremento del 63% en emisiones de bonos.
Estos datos sitúan a la entidad como el cuarto banco europeo en ESG (Environmental, Social and Governance) & Green Landing, según el ranking de la compañía de datos Refinitiv. CaixaBank se coloca así entre las entidades líderes en Europa, donde centra la mayor parte de su actividad, con operaciones formalizadas en 5 países, aunque también actúa en el continente americano.
Desde 2017, CaixaBank ha movilizado 27.300 millones de euros en financiaciones sostenibles y suma un total de 116 operaciones. Siguiendo esta línea, el banco ha creado un nuevo equipo dentro del área de negocio de Banca Corporativa, Institucional e Internacional. El departamento de Finanzas Sostenibles que se ha puesto en marcha se encargará a partir de ahora de impulsar este tipo de financiación ‘verde’ y también de desarrollar productos sostenibles que puedan trasladarse a otras áreas. De este modo la entidad busca consolidar una propuesta global basada en criterios medioambientales y sociales.
Soluciones ‘verdes’ de financiación
Casi la mitad de las operaciones de financiación sostenible que CaixaBank ha formalizado este año, un total de 23 por valor de 2.034 millones de euros, son préstamos sostenibles ESG-Linked, un tipo de préstamo que vincula el tipo de interés a objetivos sostenibles.
Una de las mayores operaciones ha sido el préstamo sindicado sostenible de Naturgy, aunque también cabe destacar el sindicado de Ferrer, que se ha convertido en el primer préstamo sostenible en el sector farmacéutico firmado en España. Otras compañías, como El Corte Inglés o Intermas, han formalizado con la entidad las primeras operaciones sostenibles con aval ICO.
Por otro lado, se encuentran los préstamos verdes, que se destinan al apoyo de proyectos con efectos positivos (y directos) sobre el medioambiente. Hasta septiembre, CaixaBank realizó 15 préstamos verdes por valor de 750 millones de euros. Entre ellos se incluye la primera financiación verde para una planta de tratamiento de agua, para Aguas Industriales de Tarragona. También se ha proporcionado financiación a un nuevo centro logístico operado por Amazon en España, ya que cuenta con la certificación de construcción sostenible Breeam.
Finalmente, en cuanto a la banca transaccional, CaixaBank ha movilizado 1.850 millones de euros para liderar la innovación del segmento. Destacan en este ámbito los dos primeros factoring sostenibles de España, realizados con Siemens-Gamesa y Endesa.
Bonos sostenibles para financiar la energía renovable
En el mercado de capitales, CaixaBank ha emitido 11 bonos verdes o sostenibles por valor de 7.400 millones de euros, lo que representa un incremento del 63% respecto al mismo periodo del año anterior. Red Eléctrica, Energía de Portugal y la Comunidad Autónoma del País Vasco son algunos de los receptores de estos bonos.
Sin embargo, una de las acciones más destacadas de la entidad este año en este ámbito ha sido la emisión de un bono verde por 1.000 millones de euros destinado a financiar proyectos de energía renovable y edificios energéticamente eficientes. Además, se ha emitido un bono social también por valor de 1.000 millones de euros para mitigar los efectos de la crisis económica provocada por la Covid-19. Este bono financiará pymes y microempresas de las zonas más desfavorecidas de España.
Un dato interesante es que, en 2019, CaixaBank fue el primer banco español en emitir un bono social para apoyar los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas. Estas metas, fijadas por la ONU para combatir la pobreza y el cambio climático antes de 2030, han sido adoptadas por multitud de gobiernos y empresas de todo el mundo.
CaixaBank, a través de su Plan de Banca Socialmente Responsable está contribuyendo con la consecución de los objetivos de la ONU. Mediante su actividad y el impulso de proyectos ‘verdes’ apoya la protección del medioambiente y la lucha contra el cambio climático. Al mismo tiempo, este tipo de iniciativas lo consolidan como uno de los principales bancos en financiación sostenible en Europa.