Openbank, el banco digital propiedad de Santander, ha realizado una ampliación de capital por unos 170 millones de euros con el objetivo de apoyar la financiación de su expansión internacional, proceso a través del que la entidad acumula presencia en cuatro países y planea abarcar, al menos, otros tres en los próximos años.
Al tratarse de una filial no cotizada y propiedad al 100% de Santander, el capital ampliado será inyectado en su totalidad desde la matriz. Tras esta operación, el capital total suscrito del que dispone la entidad se sitúa en unos 365 millones de euros.
La filial de Santander que dirige Ezequiel Szafir ha decidido dotarse de mayores recursos para continuar ampliando su volumen de negocio y apuntalar su internacionalización, según explican desde el banco, que cerró el ejercicio 2020 con unas ganancias de 5 millones de euros (frente al millón que registró como beneficio en 2019).
Tres lanzamientos
La entidad se encuentra inmersa en un ambicioso plan de expansión internacional, que hace unos tres años ya avanzó que abarcaría diez mercados en el medio plazo. Las intenciones se van cumpliendo poco a poco y Openbank opera ya en Alemania, Portugal y Países Bajos, además de en España, donde nació hace 26 años.
El banco está preparando, asimismo, su lanzamiento en Argentina, donde ya dispone de licencia bancaria y tiene la intención de comenzar a operar en el primer semestre de este año.
Más allá de estos procesos en marcha, tiene entre sus planes debutar en México y Estados Unidos. En el primero de ellos, de hecho, el banco dispone ya de licencia bancaria, si bien ambos proyectos se encuentran aún en una fase incipiente.
Mientras tanto, en España, Openbank acaba de finalizar la mudanza de sus servicios centrales y opera en la actualidad desde la Plaza Santa Bárbara de Madrid, tras cuatro años instalada en el edificio de Paseo de la Castellana número 134, donde el banco mantiene su única sucursal física.
Digital Consumer Bank
Desde esta nueva sede, Openbank protagonizará los próximos meses, además, uno de los proyectos más importantes de Santander para este año: la creación de Digital Consumer Bank, el resultado de la integración entre el banco y Santander Consumer Finance.
El grupo quiere aprovechar las capacidades digitales de Openbank y la fortaleza de su financiera en varios países europeos para crear un gigante mundial de la financiación al consumo que en la actualidad suma unos 20 millones de clientes en quince países.
A medio plazo, los planes de Santander pasan por duplicar el beneficio de la nueva entidad y situar su rentabilidad, medida a través del ROTE ordinario (rentabilidad sobre el capital tangible), en el entorno del 15%.
Sin duda, un impulso a la digitalización que Santander se está tomando en serio y para el que el año pasado fichó a 2.000 expertos digitales, de forma que un 17% de su plantilla (sin tener en cuenta las sucursales) tiene habilidades en tecnología o datos, como recoge el informe anual de la entidad correspondiente a 2020.