Los bancos españoles endurecen la concesión de crédito a las pymes pero no a las grandes empresas
En el resto de Europa los criterios fueron más duros para ambos segmentos, pero en España se produjo esa diferencia durante el primer trimestre del año.
20 abril, 2021 10:57Noticias relacionadas
Los bancos españoles continúan endureciendo los criterios de concesión que exigen a los clientes (particulares y empresas) a la hora de otorgarles crédito. Así ha vuelto a ocurrir en el primer trimestre del año, especialmente en el segmento de las pymes, pues en el caso de las compañías más grandes las condiciones se mantuvieron estables.
Estas conclusiones provienen de la Encuesta de Préstamos Bancarios del Banco de España, publicada este martes, que también refleja que la situación en España contrasta con la de las entidades de toda la Unión Monetaria, donde se produjo un endurecimiento en ambos segmentos.
En cuanto al vencimiento de los créditos, las conclusiones del supervisor revelan un "cierto endurecimiento" en los préstamos a largo plazo, mientras que los que tienen un horizonte más corto no habrían experimentado variaciones significativas.
Aumento de los riesgos
Esta actuación por parte de los bancos se debe a un aumento de los riesgos que las entidades están percibiendo como consecuencia de la situación económica y la incertidumbre sobre el fin de la pandemia y la solvencia de las empresas más afectadas, especialmente de las pymes, que son las que tienen peores perspectivas en este sentido.
Con todo, durante el primer trimestre del año la demanda de préstamos se redujo de forma generalizada en España y en la zona euro, aunque en menor medida en este último caso, según concluye el Banco de España.
De cara al próximo trimestre, el segundo del año, las entidades esperan que el endurecimiento de las condiciones de los préstamos se mantenga, aunque de forma moderada, mientras que creen que la demanda repuntará en España y en la zona euro en todos los segmentos.
En cambio, como explica el Banco de España, las condiciones generales de las nuevas operaciones se habrían relajado ligeramente en los tres primeros meses del año, lo que se traduce en un descenso de los márgenes aplicados por algunos bancos en los préstamos ordinarios, algo que se explica por los menores costes de financiación de las entidades y la mayor disponibilidad de fondos.