CaixaBank y Mapfre siguen avanzando en las negociaciones para zanjar la ruptura de la aseguradora con Bankia, con la que mantenía un acuerdo de bancaseguros antes de la fusión. Siete meses después de que la integración se hiciera efectiva y, por tanto, se rompiera la alianza, ambas compañías confían en que el cierre de la operación se produzca este mismo año y puedan seguir su camino en solitario.
Las negociaciones llevan en curso más de medio año y de ellas deberá salir un acuerdo sobre la indemnización que CaixaBank tendrá que abonar a Mapfre por romper el acuerdo que tenía esta con Bankia, en virtud del cual la entidad comercializaba en exclusiva los seguros de la compañía.
Esta alianza es incompatible con el hecho de que CaixaBank tiene sus propias aseguradoras para este negocio, VidaCaixa (seguros de vida y pensiones) y SegurCaixa (seguros generales). La primera es la filial aseguradora de CaixaBank, mientras que la segunda es una joint venture que el banco tiene con Mutua.
En las negociaciones entre el grupo bancario y el asegurador media un experto independiente, que entregará en los próximos días su informe sobre la valoración de los negocios de vida y no vida de la alianza (se excluye la cartera de seguros), un documento clave para el proceso.
Ambas compañías saldrán pronto de dudas, pues esperan que este informe llegue a lo largo de noviembre, según explicó Fernando Mata, director financiero de Mapfre, el viernes durante la presentación de resultados de la aseguradora.
Una prima del 20%
El análisis del experto independiente será clave para valorar el coste final que debe asumir CaixaBank, que será el resultado de añadir una prima del 20% al valor del 51% de la participación de la aseguradora en Bankia Mapfre Vida, que debe fijar este árbitro.
Ya lo dejó claro Mapfre en una comunicación remitida a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), en la que detalló que el contrato firmado con Bankia le concede el derecho de obtener el equivalente al 120% del valor de mercado de la participación.
Si llega en el tiempo previsto este informe, ambas compañías confían en que el acuerdo se cierre antes de que termine el año, como explicaron tanto Mata como Gonzalo Gortázar, consejero delegado de CaixaBank, durante su propia presentación de resultados, celebrada también el viernes.
Solo así pondrán poner fin a una alianza que al cierre de 2020 generó un beneficio de unos 125,8 millones de euros, con una facturación en primas de 178,9 millones de euros, de acuerdo con las cuentas de la aseguradora.
La ruptura, por tanto, privará a Mapfre de un nivel importante de ingresos anuales, si bien, a cambio, le inyectará una indemnización millonaria que desde la aseguradora ya barajaban hace meses utilizar para mejorar el dividendo. Sea por eso o no, la compañía ha anunciado una subida de la remuneración al accionista de 0,01 euros por título, hasta los 0,06 euros por acción.