Qué es SWIFT, el 'botón nuclear' financiero con el que Europa frenará el ataque de Rusia sobre Ucrania
El Parlamento Europeo pidió la pasada semana al Consejo tener preparada una respuesta económica y financiera "severa" contra Rusia.
24 febrero, 2022 13:33Noticias relacionadas
Los líderes de la Unión Europea tienen claro que la respuesta al ataque de Rusia sobre Ucrania debe ser contundente. La UE, Estados Unidos y Reino Unido han anunciado este sábado una tercera tanda de sanciones contra el Kremlin en un nuevo intento de detener cuanto antes la invasión de Ucrania. Los aliados occidentales han acordado desconectar del sistema internacional de pagos SWIFT a los bancos rusos que sostienen el ataque militar ruso. Además, se bloquearán los activos del Banco Central de Rusia y se prohibirá a los oligarcas rusos utilizar sus activos financieros en los mercados occidentales.
Hace unos días, el Parlamento Europeo, el poder legislador comunitario, aprobó una declaración para pedir al Consejo la puesta en marcha de sanciones económicas de extraordinaria dureza en el caso de que el Kremlin decidiera lanzar a sus tropas a una invasión de Ucrania, una amenaza que finalmente se ha materializado. Entre estas sanciones que ya se han materializado se encuentra apretar el botón nuclear para expulsar a Rusia del sistema de telecomunicaciones clave para el funcionamiento de la banca mundial, SWIFT, que dejará al país que preside Vladímir Putin considerablemente descolgado.
"Estas sanciones deben incluir la exclusión de Rusia del sistema SWIFT, sanciones individuales contra personas cercanas al presidente ruso y sus familias que impliquen la congelación de sus activos financieros y físicos en la Unión Europea y prohibiciones de movilidad", apuntan los líderes del Europarlamento.
Una medida que dejará muy descolgada financieramente a Rusia, pues la Sociedad Global Interbancaria de Telecomunicaciones Financieras (SWIFT, por sus siglas en inglés), nacida bajo el amparo de la regulación belga en los años 70, es una sociedad cooperativa a través de la cual están conectadas más de 11.000 entidades de unos 200 países en todo el mundo.
Es, en definitiva, el sistema a través del cual prácticamente todo el sistema financiero mundial se comunica para poder llevar a cabo transacciones financieras. Es, por tanto, un sistema del que dependen individuos, empresas e instituciones por todo el mundo, aunque no sean conscientes de ello.
Bloqueo "tremendo"
Al tratarse de una red tan importante para el sistema financiero, ¿qué consecuencias tendrá para Rusia su expulsión? "Una empresa que opera con Rusia o una empresa rusa que opera con el resto de las entidades adheridas a SWIFT no podrá operar, no se podrán realizar los pagos". Es una medida que imposibilitará que las empresas rusas y del resto del mundo que operan con Rusia puedan hacer transacciones", explica Miguel Ángel Bernal, profesor del IEB, a EL ESPAÑOL-Invertia.
Como símil, este economista explica que será como cortarle Internet a las empresas rusas, pues no podrán tener acceso a la red a través de la cual los bancos de todo el mundo se comunican a la hora de efectuar transacciones. O como impedir el acceso a un cajero a un particular. "El bloqueo será tremendo", añade Bernal, que apunta que es posible que Rusia pueda desarrollar una alternativa al uso de SWIFT, pero "eso lleva tiempo".
Con presionar este botón nuclear no solamente ha amenazado la Unión Europea, sino que lleva haciéndolo unas semanas también Estados Unidos. Según recogía hace unos días The New York Times, funcionarios de la Administración Biden han llegado a reunirse con la banca estadounidense para abordar los riesgos y las consecuencias de las sanciones a Rusia, entre las que se encuentra cortar el acceso a SWIFT a las entidades del país.
No será la primera vez que Estados Unidos recurrá a la opción de las sanciones económicas para castigar a otro país, pero pocos precedentes existen.
Precedentes
Y es que el país que lidera Vladímir Putin se ha preparado durante años para dejar de ser tan dependiente de Occidente, una lección que ha aprendido de la intervención militar en Crimea en 2014, que ya tuvo un coste económico importante para el país por las sanciones impuestas por la comunidad internacional.
Tampoco será la primera vez que se toma esta medida, pero los precedentes no son buenos. En la pasada década, el Consejo Europeo prohibió que empresas como SWIFT continuaran dando servicios a los bancos iraníes como sanción por la Unión Europea al país tras incumplir sus compromisos nucleares, algo que no pasó desapercibido para la economía de Irán por las caídas de ingresos de sus empresas. No en vano, la desconexión se llevó a cabo el 17 de marzo de 2012 y la sanción fue levantada en octubre de 2015.
Claro que Rusia es un país mucho más poderoso que Irán, por lo que las consecuencias serán mucho mayores. Y es que, como ya apuntó Boris Johnson, primer ministro británico, hace algunas semanas, cuando comenzaba a cobrar fuerza esta opción, expulsar a Rusia de SWIFT "sería un arma muy potente".
Es por eso que Rusia es el primer interesado en que no se materialice esta amenaza. "SWIFT es un sistema de liquidación, es un servicio. Si Rusia se desconecta de SWIFT no recibiremos divisas, pero los compradores, los países europeos en primer lugar, no recibirán nuestros productos: petróleo, gas, metales y otros componentes importantes de sus importaciones. ¿Lo necesitan? No estoy seguro", apuntaba hace unos días Nikolay Zhuravlev, vicepresidente de la Cámara Alta del Parlamento de Rusia, a la agencia de noticias rusa TASS.