Clientes de Silicon Valley Bank se agolpan a las puertas de una sucursal. E. E.
Silicon Valley Bank: las 48 horas que desataron la mayor quiebra bancaria de Estados Unidos desde 2008
Un banco que no había dado señales de peligro antes de esta semana protagoniza una caída histórica que coincide con la del cripto Silvergate.
12 marzo, 2023 02:15Silicon Valley Bank ha pasado de ser una entidad poco conocida para el gran público a abrir los periódicos de medio mundo. No es para menos, pues su quiebra es la más grande que ha vivido un banco de Estados Unidos desde 2008, cuando estalló la crisis financiera. Aunque las autoridades han tomado el control de la entidad, cientos de empresas tiemblan ante la perspectiva de no poder hacer frente a sus obligaciones financieras en las próximas semanas. Una debacle que se ha gestado en apenas 48 horas.
Fue el pasado miércoles cuando la entidad hizo los anuncios que han sacudido las bolsas mundiales, con especial saña en el caso de los bancos estadounidenses y europeos. Silicon Valley Bank informó de su necesidad de lanzar una millonaria ampliación de capital para cubrir pérdidas de unos 1.800 millones de dólares (1.704 millones de euros).
Unas pérdidas que se generaron después de que la entidad se viera obligada a vender una cartera de títulos respaldados por hipotecas con un valor de 21.000 millones de dólares (19.700 millones de euros) con el objetivo de cubrir una importante salida de depósitos.
Algunas personas intentan acceder a una sucursal de Silicon Valley Bank el pasado viernes. Reuters Nueva York (Estados Unidos)
En consecuencia, el banco informó de su intención de realizar una colocación acelerada de acciones por valor de 1.750 millones de dólares (1.656 millones de euros) con el objetivo de sanear su posición de capital.
En concreto, planeaba ofrecer 1.250 millones de dólares (1.183 millones de euros) en acciones ordinarias y otros 500 millones de dólares (473 millones de euros) en acciones preferentes mediante sendas ofertas públicas y suscritas por separado con el objetivo de reforzar su posición financiera.
Algunos expertos achacan esta repentina fuga de depósitos a las dificultades de muchas compañías tecnológicas para hacer frente a la subida de los tipos de interés. Desde CNBC se apunta a que "los clientes retiraron depósitos para mantener sus empresas a flote en un ambiente frío para las opas y la recaudación de fondos privados".
Tampoco ayudó a la calma el hecho de que el mismo miércoles se produjera el pinchazo de Silvergate, entidad dedicada prácticamente en exclusiva al negocio de los criptoactivos. La entidad anunció el cierre de sus operaciones después de no haber sido capaz de superar el impacto del colapso de FTX.
La mayor quiebra desde 2008
La de Silicon Valley Bank es una crisis de liquidez en toda regla que ha desatado los viejos fantasmas de la banca. La quiebra de esta entidad es la mayor desde 2008, fecha que el sector financiero mundial prefiere no recordar, cuando Washington Mutual protagonizó el mayor derrumbe de una entidad estadounidense.
Aquel banco, que desapareció tras una venta de urgencia a JP Morgan, contaba con más de un siglo de historia, unas 2.000 sucursales y activos por valor de unos 300.000 millones de dólares (unos 280.000 millones de euros al cambio actual).
[California interviene el Silicon Valley Bank para garantizar los depósitos de sus clientes]
Silicon Valley Bank es algo más pequeña, pues cuenta con activos por un valor de 209.000 millones de dólares (equivalentes a unos 196.300 millones de euros). Para hacerse idea del tamaño, se trata de un volumen que se asemeja al de Sabadell.
Además, dispone de 175.400 millones de dólares (164.800 millones, también similar a Sabadell) en depósitos y el problema reside en los que no están garantizados. Al igual que en España, en Estados Unidos existe un sistema de protección de los depósitos de la clientela, de forma que solo están garantizados en caso de quiebra de una entidad los primeros 250.000 dólares de cada cuenta. Los importes que excedan este umbral no están protegidos.
Logo de Silicon Valley Bank en la sede central del banco en Santa Clara. Reuters California (Estados Unidos)
Hasta esta semana el banco no había dado muestras de encontrarse en una mala situación financiera, si bien la fuga de depósitos se lo ha llevado por delante. De nada sirvió que Greg Becker, consejero delegado de la entidad, intentara transmitir confianza a sus clientes y al mercado durante una call celebrada el viernes.
Solamente el jueves se ordenaron salidas de depósitos de la entidad por valor de 42.000 millones de dólares (39.450 millones de euros). Entretanto, el directivo dejó de ser miembro del consejo de la Reserva Federal de San Francisco.
Pánico bursátil
Ese mismo jueves fue el momento en el que se desató un verdadero pánico en las bolsas. Los valores de Wall Street, especialmente los bancarios, se vieron ampliamente penalizados en la sesión.
La propia entidad se dejó más de un 60% en bolsa ese día, la mayor caída del valor en 35 años. En las dos últimas sesiones (jueves y viernes) los bancos estadounidenses perdieron 100.000 millones de valor de mercado, según datos de Reuters.
El viernes tocó el turno del sector bancario europeo. El alemán Deutsche Bank se llevó la peor parte al desplomarse un 7,35%, mientras que Sabadell perdió un 5,11%, el holandés ING un 4,59%, el belga KBC Groep un 4,54%, el francés Société Générale un 4,49%, Bankinter un 4,22%, Santander un 4,21% y BBVA un 3,41%, entre otros muchos.
El viernes los títulos de Silicon Valley Bank directamente no llegaron a negociarse en bolsa. Su cotización fue suspendida en la apertura del mercado, lo que evitó un desplome mayor, pues en la actividad previa se vislumbraban ya descensos superiores al 60%.
Intervención
Las autoridades estadounidenses decidieron suspender la cotización a la espera de más información tras conocerse que Silicon Valley Bank estaba en conversaciones con algunas entidades para la venta de su negocio, algo que desveló la CNBC. La propia cadena informó más tarde de que la entidad había sido incapaz de encontrar un comprador.
Muy poco después se produjo la intervención. El Departamento de Protección Financiera e Innovación de California decidió el viernes cerrar Silicon Valley Bank con el objetivo de garantizar los depósitos de la clientela. La entidad quedó desde entonces bajo el mando de la Corporación Federal de Seguros de Depósitos (FDIC).
Puerta cerrada de una sucursal del Silicon Valley Bank en Menlo Park. Reuters California (Estados Unidos)
Cuando las autoridades realizaron la intervención, la entidad tenía un saldo de efectivo negativo de unos 958 millones de dólares (900 millones de euros al cambio actual). Y es que Silicon Valley Bank fue incapaz, pese a la asistencia de los reguladores, de presentar ante la Reserva Federal los colaterales necesarios para garantizar su solvencia.
"La retirada precipitada de los depósitos ha causado que el banco sea incapaz de pagar sus obligaciones a su vencimiento y el banco es ahora insolvente", apuntó el Departamento de Protección Financiera e Innovación en un comunicado tras la intervención del banco.
Las conclusiones de las autoridades fueron tres: que la posición de liquidez de la entidad era "inadecuada" y no se esperaba que pudiera hacer frente a sus obligaciones de pago, que el banco era insolvente y que la entidad estaba dirigiendo su negocio "de forma poco segura" debido a la situación financiera en la que se encontraba.
Es por eso que los reguladores tomaron la decisión de cerrar Silicon Valley Bank y tomar su control desde el viernes y durante todo el fin de semana. El próximo lunes tanto la sede central como las sucursales del banco volverán a abrir.
Garantía de los depósitos
Ahora bien, no todo el dinero se va a devolver a los clientes de forma automática, sino solamente el que esté garantizado por el esquema de protección de Estados Unidos, es decir, 250.000 dólares de cada cuenta. A estos clientes se les devolverán sus depósitos "no más tarde del lunes por la mañana".
Sin embargo, la mayor parte de los clientes de Silicon Valley Bank no está en esa situación, pues el banco está especializado en financiar a startups tecnológicas. Por esos fondos que no están garantizados las empresas recibirán una suerte de "dividendo" la próxima semana. Para recuperar la totalidad, en cambio, deberán esperar a que se vendan los activos de la entidad, algo que puede tardar mucho tiempo.
Un hombre habla con un guardia de seguridad en una sucursal de Silicon Valley Bank. Reuters Nueva York (Estados Unidos)
Es por eso que muchas compañías empiezan a temer que no van a poder hacer frente a sus compromisos financieros a corto plazo, como el pago de las nóminas de sus trabajadores.
En cuanto a los empleados de Silicon Valley Bank, que eran unos 8.528 al cierre del pasado año, la FDIC les ha ofrecido a través de un correo electrónico 45 días de trabajo a 1,5 veces su sueldo en la entidad, según desvela Reuters, y lo largo del fin de semana serán informados sobre sus beneficios laborales y su seguro médico. Por el momento, se les ha pedido que continúen trabajando en remoto, salvo a ciertos trabajadores cuya presencia en la sede es necesaria.
Al menos de momento, los expertos descartan un efecto contagio en la banca europea. "Creemos que el riesgo de una gran salida de depósitos y las consiguientes desinversiones de bonos y emisiones de capital es bajo para los bancos europeos diversificados", apunta Guy de Blonay, gestor de Inversión y Valores Financieros de Jupiter Asset Management.
Por lo pronto, el Ministerio de Finanzas de Reino Unido ha informado de que trabaja junto al Banco de Inglaterra para minimizar el impacto del colapso de Silicon Valley Bank en el país. Las autoridades británicas, de hecho, han intervenido la filial del banco en Reino Unido.
Para saber con certeza si habrá alguna clase de contagio habrá que monitorizar este repentino e histórico colapso que se ha gestado en apenas 48 horas, así como su impacto en otras entidades. Lo que está claro es que los viejos fantasmas del sistema bancario han vuelto. Y han traído con ellos mucho pánico.
