El Banco Central Europeo (BCE) se pone serio con la liquidez de la banca tras las turbulencias vividas en Estados Unidos y la caída de Credit Suisse. El supervisor está intensificando su escrutinio de las reservas de liquidez de las entidades y podría comunicar requisitos de capital más estrictos a algunas más adelante este año, según indicaron a Bloomberg fuentes no identificadas con conocimiento del asunto.
Según estas fuentes, recoge Europa Press, es probable que la revisión anual del BCE de los riesgos que deben abordar los bancos preste más atención a la gestión de fondos líquidos, incluyendo una potencial mayor exigencia en métricas clave como el índice de cobertura de liquidez (LCR), además de la mayor interacción entre los bancos y el BCE sobre esta cuestión.
Como alternativa a elevar el LCR, las fuentes apuntaron que el BCE podría criticar de manera individual a los bancos por la calidad de sus reservas o la capacidad para administrarlas.
De hecho, según añade Reuters, el BCE está estudiando la posibilidad de imponer requisitos adicionales de capital a los bancos con una elevada proporción de depósitos no garantizados, es decir, que superen el umbral de 100.000 euros.
La institución probablemente recibirá los resultados iniciales de su revisión anual durante el verano y más adelante, los bancos serían divididos en diferentes grupos según la vulnerabilidad de sus modelos comerciales a las salidas de fondos.
Este jueves, el vicepresidente del BCE, Luis de Guindos, reclamaba prudencia a las entidades en temas como los dividendos y las recompras de acciones en un momento en el que se está retirando liquidez del mercado. "La liquidez se va a convertir en un valor cada vez más importante", advertía.