Unas 42.000 familias han solicitado a los bancos la aplicación de las medidas de rescate hipotecario incluidas en el Código de Buenas Prácticas. Del total, tan sólo el 10% han sido aprobadas por el momento, mientras que el 50% está en revisión.
El 40% restante han sido rechazadas, mayoritariamente por no cumplir con los requisitos que incluye el programa. En relación con estas que han sido desestimadas, los bancos han recibido unas mil reclamaciones y, de ellas, el 90% se ha resuelto a favor del hipotecado.
Así lo han dado a conocer los expertos del Banco de España este jueves durante la presentación del Informe de Estabilidad Financiera de otoño. Consideran que se trata de un número "limitado" respecto a las hipotecas que están en circulación, pues solamente representa el 0,4% del total, y a los préstamos hipotecarios que cumplían las condiciones para acogerse.
No obstante, los expertos del supervisor bancario creen que se trata de un volumen "notablemente superior" en comparación con el promedio observado en la aplicación del Código de Buenas Prácticas de 2012.
Esto se explica porque estas solicitudes se han registrado tan sólo en un semestre debido a la rapidez de la subida de los tipos de interés, que ha afectado a estas familias. En el Código de Buenas Prácticas de 2012, sin embargo, hasta que pasaron cinco años no dejaron de registrarse altos volúmenes de solicitudes.
Medidas de apoyo
Hay que recordar que el Gobierno y la banca pactaron a finales del año pasado una serie de medidas con el objetivo de aliviar la carga financiera de las familias, que empezaban a enfrentar un fuerte encarecimiento de sus hipotecas variables por el vertiginoso avance del Euríbor junto a una elevada inflación en productos de primera necesidad.
Este plan supuso la actualización del Código de Buenas Prácticas de deudores hipotecarios puesto en marcha en 2012 y la creación de uno nuevo. En ambos se recogen medidas como la congelación de las cuotas, el alargamiento del plazo de vencimiento de los préstamos y otras soluciones de reestructuración de la deuda. Estas medidas han sido solicitadas ya por los titulares de 42.000 hipotecas, según ha dado a conocer el Banco de España.
Pronto para valorar
Con todo, Ángel Estrada, director general de Estabilidad Financiera, Regulación y Resolución del Banco de España, considera que es "pronto para hacer una valoración de lo que está ocurriendo".
No obstante, cree que el volumen es "significativo", sobre todo teniendo en cuenta que en 2012 la situación financiera de las familias era más complicada y que las condiciones de concesión de las hipotecas en aquel momento eran más "laxas".
En su opinión, "hay que esperar" para ver las implicaciones de la cifra, si bien la valoración actual del supervisor es que la cifra va "bastante en línea" con sus estimaciones previas. Hay que recordar que el Banco de España dio a conocer hace medio año que consideraba que unas 270.000 familias llegarían a pedir este rescate hipotecario.
"La hipoteca es lo último que la gente deja de pagar", ha recordado, añadiendo después que la evidencia de años de estudio por parte del Banco de España habla de que pasan hasta dos años desde que se produce un shock en su renta o en su empleo hasta que un hipotecado deja de abonar sus cuotas. "Eso de momento no está ocurriendo", ha agregado.
Además, al hecho de que ese volumen sea "alto" en comparación con 2012 ha afectado también que los criterios de elegibilidad incluidos en los Códigos de Buenas Prácticas con vigencia en la actualidad son más amplios que hace diez años.
Estrada considera que la situación actual de tipos de interés elevados "puede tener un impacto relevante" sobre las familias, "pero hay que dejar que pase el tiempo, no se produce de hoy para mañana".
Un 30% aún pagará más
En todo caso, de acuerdo con las estimaciones del Banco de España, el 30% de los hogares que tienen una hipoteca variable aún experimentarán una subida en su cuota superior a un 1% en el plazo de un año a contar desde el pasado mes de junio.
Es por eso que, según se recoge en el Informe de Estabilidad del Banco de España, "de cara al futuro es esperable una mayor transmisión del incremento de los tipos
de interés al coste de la deuda viva de los hogares, lo que contribuiría al aumento de la proporción de hogares endeudados con carga financiera elevada".
En cuanto al 70% restante, ya habría hecho frente al grueso del incremento de intereses. Eso si el Banco Central Europeo (BCE) no decide seguir elevando los tipos de interés y el Euríbor responda subiendo de nuevo con fuerza.