En concreto, fuentes de BBVA trasladan a este periódico que el Gobierno "apreciará los beneficios de la transacción, ya que generará una mejor entidad para todos los grupos de interés".

Entre ellos, los inversores de ambas entidades y la sociedad en su conjunto, que se verán beneficiados de contar con un banco más eficiente y con mayor capacidad para dar crédito, según consideran en la entidad.

[El mercado ve poco probable que el Gobierno frene la fusión de BBVA y Sabadell pese a la oposición de Economía]

Lo cierto es que, como ha informado EL ESPAÑOL-Invertia, varias casas de análisis están dudando sobre la posibilidad de que el Gobierno termine frenando la fusión a pesar de que la opa salga adelante, algo que dejaría a BBVA como propietario de dos entidades bancarias.

Los expertos de Morningstar lo consideran "improbable", mientras que los de Deutsche Bank no recuerdan precedentes así. Por su parte, los analistas de Barclays no ven "grandes obstáculos" para que BBVA obtenga las autorizaciones pertinentes para llevar a cabo la operación, incluida la del Ejecutivo.

En el Gobierno, sin embargo, llevan semanas defendiendo que la última palabra sobre la fusión es del Ministerio de Economía, Comercio y Empresa. Carlos Cuerpo, el titular del departamento, ha mostrado su preocupación sobre el impacto de la fusión en la competencia y la cohesión territorial.

Pero más agresiva se ha mostrado la vicepresidenta primera del Gobierno, María Jesús Montero. "El Gobierno no va a autorizar esta operación", llegó a señalar la también ministra de Hacienda el pasado 9 de mayo, cuando se conoció la opa hostil.

Primer encuentro

El ministro de Economía se va a ver las caras con la entidad este miércoles, pero no específicamente para hablar de este tema. Cuerpo se reúne con los banqueros de las entidades adheridas a la Asociación Española de Banca (AEB) y en nombre de BBVA acudirá Peio Belausteguigoitia, country manager de la entidad en España.

A esa misma reunión acudirá César González-Bueno, consejero delegado de Sabadell, de forma que los directivos de ambas entidades se verán las caras en medio de la tensión generada por la propuesta de fusión amistosa y posterior opa hostil.

[BBVA solicita a la CNMV la autorización de su opa sobre el 100% de Sabadell]

El banco azul solicitó el pasado viernes la autorización de la operación a la CNMV y ahora tiene que esperar para recibir la aprobación del Banco Central Europeo (BCE), que debe pronunciarse ante el hecho de que la opa tiene como objetivo la fusión de dos bancos de gran tamaño.

Una vez cuente con estas y las demás autorizaciones pertinentes, será el momento en el que BBVA podrá dirigirse a los accionistas de Sabadell para ponerles la opa sobre la mesa. Si durante el periodo de aceptación una mayoría acepta el canje de acciones, BBVA ya tendrá el camino despejado para llevar a cabo la fusión.

Para el banco, el hecho de que las autoridades junto a miles de inversores, en su mayoría españoles, den su visto bueno a la opa implica un importante respaldo que podría ayudar a acercar posiciones con el Gobierno. En todo caso, para que el Ejecutivo deba pronunciarse faltan aún muchos meses.