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Carlos Torres, presidente de BBVA, junto a Onur Genç, consejero delegado del banco, durante la presentación de los resultados del ejercicio 2024 de la entidad. Efe Madrid
BBVA reconoce que el impuesto a la banca "puede incidir en el calendario" de la integración de Sabadell y retrasarla
Torres afirma que el tributo, que tendrá un impacto mayor si dos bancos se fusionan, tendrá por ello un "efecto negativo" que puede afectar al valor de la operación.
Más información: BBVA supera los 10.000 millones de beneficio en 2024, un 25% más, y volverá a recomprar acciones
Carlos Torres, presidente de BBVA, ha reconocido que el banco podría atrasar la fecha de integración definitiva de Sabadell para evitar el impacto "negativo" que tendrá el impuesto a la banca en el valor de la operación de fusión. Y es que el tributo incluirá una progresividad que eleva el impacto en el caso de que dos bancos se integren.
El Gobierno pretende que el rediseñado impuesto a la banca tenga un impacto superior en el caso de que dos entidades se integren, de forma que si BBVA consigue adquirir Sabadell abonaría un importe superior al que ambos bancos pagarían por separado.
Es la intención del Ejecutivo, que incorporó este matiz en el real decreto ómnibus que decayó hace unos días por falta de apoyo en el Congreso, aunque es posible que vuelva a incluirlo en otra legislación tras trocear el decreto.
En todo caso, este matiz implicaría que BBVA tendría que asumir un "efecto negativo" que el banco no ha cuantificado aún, según ha explicado Torres durante la presentación de resultados del banco, que en 2024 superó los 10.000 millones de euros de beneficio, un 25% más que en el ejercicio anterior.
Un impacto que el banco tendrá en cuenta a la hora de decidir cuánto integra Sabadell una vez se haga con su control. "Es algo que tendremos que analizar a su tiempo, tampoco es que la fusión ocurra el día 1, requiere una planificación importante y pasarían bastantes meses hasta que se llevara a cabo la fusión", ha explicado.
"Y, efectivamente, el impuesto pudiera incidir en el calendario. Lo tendremos que tener en cuenta", ha señalado, justificándolo en que el equipo de la entidad deberá tratar de "minimizar el daño" que pueda tener en el valor de la operación al "tener que pagar una cantidad adicional por la escala progresiva del impuesto".
En todo caso, Torres ha defendido que "no ha cambiado" la estimación del banco de obtener unas sinergias de 850 millones de euros con la operación, pese al matiz del impuesto. Además, ha apuntado que en el banco están "a la espera" de que "se remate la normativa" con los "aspectos técnicos" que faltan por aprobar.
Para Torres, "el plan es hacer la fusión posteriormente al canje de acciones", aunque en el caso de que se retrasara "la operación sigue siendo atractiva sin fusión". "Ese sigue siendo el plan y esperamos que podamos llevarlo a cabo".
El presidente de BBVA ha mostrado su confianza en que los compromisos "inéditos" que ha presentado ante la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) serán suficientes para que la autoridad apruebe la operación "en las próximas semanas".
"El análisis que ha hecho la CNMC en la fase 1 ha acotado los potenciales problemas de la operación a tres ámbitos muy concretos y nosotros hemos presentado unos compromisos inéditos", ha dicho.
Los gestores de BBVA mantienen también su negativa a mejorar la oferta por el 100% del capital de Sabadell. "Hemos sido muy claros al principio sobre la falta de espacio para mejorar", ha apuntado.
Correlación entre las acciones
Además, ha valorado que es "clara" la correlación que existe entre la evolución de las acciones de ambos bancos, a pesar de que hace unos días el diferencial entre ambas fue negativo por primera vez.
En su opinión, se trata de una "correlación sostenida en el tiempo", que "se ha mantenido en niveles muy elevados", con "muchos ejemplos de ello día tras día". "El valor [de Sabadell] está muy atado" al de BBVA, según ha dicho.