La quebradiza Abengoa se ha convertido en un disputado trofeo. Hasta 45 firmas han presentado ante la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) su propuesta para hacerse con la administración concursal de la compañía sevillana. Se trata de una cifra nunca antes conseguida por una cotizada que hubiera entrado en este procedimiento legal.
El presidente de la CNMV, Rodrigo Buenaventura, ha explicado este miércoles que el proceso concursal de Abengoa "ha batido el récord" con estas 45 expresiones de interés. No obstante, solo tres pasarán el filtro que el supervisor financiero ya está comenzando a aplicar y del que espera tener resultados "en los próximos días".
En este sentido, Buenaventura ha explicado que la "documentación es cuantiosa", pero que ya se ha comenzado el "proceso de evaluación" de cada una de las propuestas. En este sentido, la normativa vigente exige que la CNMV presente una terna al juez que instruye el concurso de acreedores de una cotizada.
Ronda de contactos
Buenaventura ha prometido "la mayor celeridad" en este proceso para que el concurso pueda seguir adelante y buscar una fórmula de viabilidad para la compañía sevillana. En este sentido, los acreedores y accionistas de la compañía siguen intensificando contactos para intentar la mejor salvaguarda de sus intereses en la profunda reestructuración a la que debe someterse la compañía, suspendida de negociación en bolsa desde el pasado 14 de julio.
En este sentido, Abengoa Shares, el grupo de accionistas minoritarios de la compañía liderado por Clemente Fernández, ha mantenido acercamientos con la banca acreedora, según publicó Invertia, con el objetivo de encontrar puntos en común para allanar el terreno ante la llegada del administrador concursal cuyo nombre se está decidiendo en estos momentos.
La propuesta de los minoritarios pasaría por desbloquear su entrada en la gestión de la compañía, que se vio frustrada con la suspensión de la junta extraordinaria de accionistas que habían conseguido convocar. El bloqueo de esta asamblea tuvo su origen precisamente en la declaración del concurso, ya que el juez entendió que no se daban las suficientes circunstancias de visibilidad sobre el futuro de la compañía como para celebrarla.
El objetivo último está en evitar una guerra judicial interminable con recursos cruzados por las partes, sumado al riesgo de que 12.000 puestos de trabajo terminen sin continuidad. Y todo ello sin perder de vista los problemas que los bancos tendrían para cobrar deudas por más de 6.000 millones de euros.
Deuda y empleo
En este sentido, la banca acreedora no ve con buenos ojos una quita del 90% como la que plantearon los minoritarios hace unas semanas. En lo que sí parece haber más consenso es en pedir un rescate a la SEPI de unos 250 millones de euros, para tener la liquidez necesaria para reestructurar la compañía.
Hasta ahora, el pool bancario había deslizado la posibilidad de apoyar a los actuales gestores liderados por al actual presidente de Abengoa, Juan Pablo López-Bravo, pero la realidad indica que los minoritarios tienen el apoyo del capital necesario para que puedan asumir la gestión de la compañía.
Mientras tanto, los trabajadores de la compañía de infraestructuras y energía tienen previstas manifestaciones el próximo 19 de marzo. El objetivo es que sus reivindicaciones para el cobro de nóminas atrasadas y el mantenimiento de los puestos de trabajo se escuche en todo el centro de Sevilla, con un recorrido previsto que va desde la Plaza Nueva hasta el Palacio de San Telmo, sede de la Presidencia de la Junta de Andalucía.