Sacyr obtuvo un beneficio neto de 40 millones de euros en los primeros seis meses del año, lo que supone una reducción del 43% respecto al mismo periodo del año pasado, debido a los beneficios extraordinarios que se anotó hace un año por la venta de la autopista Guadalmedina en Málaga.
Sin tener en cuenta ese efecto, el resultado neto habría crecido un 233%, según informa a la Comisión Nacional de los Mercados de Valores (CNMV) la constructora, que también ha decidido reducir su actual participación en Repsol del 8% al 3%.
En el segundo semestre del año vencerán parte de los derivados que Sacyr tiene contratados para cubrir su participación en la petrolera, por valor de 75,4 millones, y la compañía ya ha decidido que no los renovará.
Dado que se trata de instrumentos financieros que no pasan por mercado, esta operación no afectará a la cotización de Repsol. Sacyr defiende que esta decisión le permitirá simplificar el balance del grupo y concentrar sus recursos en el plan estratégico y en su foco concesional.
Incremento de la actividad
Al margen de esta noticia y del impacto de los extraordinarios en el beneficio neto, la compañía mejoró su resultado operativo, con un incremento de los ingresos del 4,1%, hasta 2.164 millones, y del resultado bruto de explotación (Ebitda) del 15,5%, hasta 402 millones de euros, con un margen del 16,7%.
La mayor aportación provino de su negocio concesional, que aportó el 82% del Ebitda, cinco puntos más que hace un año, la mayoría de estos activos con riesgo de demanda limitado y con una remuneración basada fundamentalmente en criterios de disponibilidad. Su cartera concesional asciende a 36.000 millones.
La división de ingeniería e infraestructuras impulsó su facturación un 5% y su Ebitda un 8%, con una cartera de pedidos un 14% superior. Destacan los primeros proyectos adjudicados en Canadá, país que está dentro de la hoja de ruta marcada para el periodo 2021-2025, el incremento de la cartera en EEUU y Chile y varios proyectos de construcción y concesiones en Italia.
Por el contrario, el segmento de servicios se contrajo un 1% aunque logró mejorar su Ebitda un 8% y aumentar su margen operativo. Su cartera se situaba a cierre del periodo den 2.678 millones de euros, en línea con la del año pasado.
La cartera de ingresos futuros del conjunto del grupo se sitúa en 45.091 millones de euros, un 15% más, gracias a la incorporación de nuevos proyectos de construcción y concesionales, entre los que destacan nuevas autopistas en Italia y cuatro nuevos contratos de carreteras en Florida y Texas, entre otros.
Reducción de deuda
Durante el segundo trimestre del ejercicio, la compañía redujo el endeudamiento neto con recurso en 108 millones de euros para situarlo en 883 millones al cierre de junio, con una generación de caja operativa de las actividades con recurso antes de inversiones de 63 millones de euros. El flujo de caja operativo del grupo creció un 29%, hasta 282 millones de euros.
Tal y como marca su plan estratégico, la compañía sigue trabajando en diferentes operaciones para continuar con la reducción de la deuda, que se sitúa en 5.679 millones, a lo largo de este ejercicio. Para ello, ya ha utilizado dos instrumentos de financiación ligados a objetivos de sostenibilidad.
Por último, otro de los pilares de su plan de negocio es la retribución al accionista. Este año, Sacyr ha pagado dos 'scrip dividendo' por un valor de 0,096 euros por acción, que representan una rentabilidad por dividendo del 4,6%.