Las licitaciones desiertas en el sector de la construcción en el último año (octubre 2021-septiembre 2022) es 1.939. Traducido a euros, hablamos de 882,5 millones de euros. El importe medio es de 455.000 euros.
Así ha quedado reflejado en un informe presentado por la Confederación Nacional de la Construcción (CNC). Dicho informe también recoge los datos de 2022. En este caso, las obras desiertas han sido 1.455, que representan un total de 652,8 millones de euros. El importe medio es de 448.660 euros.
"La mayoría de estas obras son de fondos europeos. Si no se presentan ofertas, si no se ejecutan contratos, no se van a poder cumplir los objetivos para recibir fondos europeos", advirtió Pedro Fernández Alén, presidente de la CNC.
Sobrecoste
La razón por la que no se estén presentando ofertas se debe a que "las licitaciones no están saliendo ni con el precio justo ni con el sistema de reequilibrio de los contratos. Tampoco recogen los sobrecostes", afirma Fernández Alén.
Desde el segundo trimestre de 2020, el sector está sufriendo un incremento desorbitado de materias primas, lo que se traduce en retrasos. A ello hay que unir también la tardanza en la llegada de las materias primas.
Para intentar solucionar el sobrecoste, que por aquel entonces fue del 20%, el Gobierno dictó tres reales decretos. La meta era llegar a un sistema de reequilibrio de los contratos, de revisión de precios, "que creíamos que iba a funcionar de manera fluida, que iba a ser bueno para los contratistas".
Y el presidente de la CNC añade: "Estos tres reales decretos son sensiblemente insuficientes. Alrededor del 95% de las obras no está sufriendo revisión de precios, y las pymes son las que más lo están sufriendo, que no la están viendo en ningún caso". Actualmente, el sobrecoste supera el 33% de media.
Según la CNC, estos tres reales decretos sólo están funcionando en obras de larga duración y de un tamaño importante. Sobre todo relacionadas con el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana. Obras de Adif y carreteras, básicamente. "No están funcionando para CCAA y ayuntamientos", especifica.
"La sangría que están sufriendo algunas empresas es alarmante", añade. "Se ralentizan, se paralizan y se abandonan las obras". En teoría, este año se triplicará la actividad en la construcción este año impulsada por los fondos Next Generation. Lo que vaticina "una avalancha de actividad en enero". Y todo debe estar ejecutado en junio de 2026.
La solución, para Pedro Fernández Alén, pasa porque "todo lo que salga debe tener los precios actualizados. Y establecer un sistema de reequilibrio económico del contrato". Si una obra queda desierta, se vuelve al punto de partida de la licitación. Y eso supone un importante retraso. "Pasa mucho tiempo porque la normativa es muy compleja", recalca el presidente de la CNC. Más ahora con los fondos europeos llamando a la puerta.
Por comunidades autónomas, en el último año, es Cataluña la que más obras desiertas tiene: 378, por un montante de 130,3 millones. A continuación, Castilla-La Mancha, con 226 (100,9 millones de euros). Y la Comunidad Valenciana, con 209 (92,3 millones).