La cadena regional Consum se quita, de momento, de la puja por adquirir la filial catalana de Eroski, Caprabo. Si bien hace tiempo mostró su interés por comprar una parte de las tiendas de Caprabo, ahora no está dentro de los planes próximos de la compañía.
“No es nuestro objetivo prioritario”. Así lo ha asegurado Juan Luís Durich, director general de Consum, durante su intervención en el 35º Congreso de Gran Consumo de Aecoc celebrado en Valencia. El directivo ha sido rotundo y ha afirmado que “en estos momentos no estamos en ningún proyecto”, aunque “no están cerrados a operaciones”.
Y en caso de crecer a golpe de comprar, desde Consum consideran que la empresa que adquirieran debería “adaptarse a nosotros”. “Estamos abiertos a un precio razonable y que se adapte a nuestro modelo. Ahora priorizamos la coherencia”, ha detallado.
Juan Luís Durich, consciente de que es difícil hacer previsiones porque cada semana cambia la situación, indica que crecerán en ventas. Cabe recordar que Consum cerró el pasado ejercicio 2019 a las puertas de los 3.000 millones de euros de facturación. Su cifra de negocio creció un 7,4% respecto al año anterior hasta situarse en los 2.935 millones de euros.
Actualmente, cuenta con 7.000 establecimientos repartidos en seis comunidades autónomas y 16.000 empleados. Pero de momento, no parece que vaya a ampliar el porfolio con Caprabo.
¿Socio o comprador?
Desde hace años, Caprabo ha estado en el punto de mira de los procesos de desinversión de Eroski. La banca llegó a exigir su venta en un principio, pero en la última reestructuración de deuda cedieron y solo insistieron en buscar un socio estratégico para la cadena catalana. Ambas opciones están abiertas, según fuentes conocedoras del proceso.
Pero Eroski lo niega. “Por lógica, el carácter minoritario de ese socio hace que Eroski no esté pensando en desprenderse de Caprabo, un negocio que considera estratégico. Es un mercado importante, donde tenemos una red importante y donde estamos apostando y apostaremos en los próximos años. Esperamos que ese socio que estamos buscando también valore el potencial que tiene Caprabo”, señalaron fuentes de la compañía a Invertia hace un mes.
Cabe recordar que en el último acuerdo de Eroski con las entidades bancarias permitió refinanciar los 1.540 millones de euros de deuda (el 75% de su deuda total) hasta el 31 de julio de 2024 y salvó a la filial catalana de la venta. El acuerdo incluyó una nueva condición de buscar socios empresariales para alguna de las 40 empresas mercantiles.
No obstante, fuentes financieras aseguran a Invertia que “el proceso de venta se puso en marcha hace meses, pero se paralizó con motivo de la pandemia”. Lo cierto es que los rumores sobre su venta nunca han cesado, ni aun cuando la banca dejó de exigir su venta junto al 50% de Eroski Vegalsa o de la marca de ropa deportiva Forum Sport (también bajo el paraguas de la cooperativa vasca).
Caída en ventas
Rumores alimentados por la necesidad de Eroski de aliviar la situación de Caprabo, que cerró el ejercicio 2019 (a 31 enero de 2020) con una facturación de 790 millones de euros, el 13% menor que en 2018. Ese año, además, registró unas pérdidas de 5 millones de euros debido a las elevadas inversiones acometidas, según datos del Registro Mercantil.
Según explica la cadena, esta cifra de ventas de 2019 se debe, en buena medida, a la adecuación del perímetro de la compañía, que ahora concentra su negocio en Cataluña y Andorra, con un total de 29 tiendas menos (10% de la red total).
A lo largo del pasado ejercicio, la compañía abrió 12 tiendas, alcanzando una red de 303 supermercados en las que trabajan más de 6.000 personas.