Hace justo un año el supermercado ruso Mere anunciaba su llegada a España con un ambicioso plan de aperturas que rondaba las 40 tiendas y que arrancó meses después. Sin embargo, su modelo no ha cuajado y se ha producido el cierre de algunos de sus establecimientos. ¿Por qué ha fracasado el apodado 'Lidl ruso'?
Pues la principal razón está precisamente en su modelo de negocio, el hard discount, el mismo con el que Lidl y Aldi aterrizaron en nuestro país hace 20 y 28 años, respectivamente. "A Lidl y Aldi les costó que este modelo cuajase en sus inicios, pero tenían un gran grupo por detrás", asegura Juan Carlos Matarrubia, socio director de Retail Data.
De hecho, a día de hoy las dos cadenas alemanas han evolucionado hacia "otro modelo de negocio que incluye frescos, bodega, productos ecológicos y con el que ya puedes hacer una compra completa", detalla el experto.
Solo los más nostálgicos recordarán que estas cadenas abrieron sus primeras tiendas en naves a las afueras de las ciudades con lineales sin decoración y poco mantenimiento para reducir costes. Parecido a lo que ha hecho Mere, aunque en un momento en el que la distribución es distinta.
"Es un formato anacrónico en España y fallido desde un inicio. No tiene sentido porque no tiene hueco en el mercado", añade Juan Carlos Matarrubia. Y no solo no tiene cabida en el hard discount, sino tampoco en el rango del low cost.
¿Por qué? Porque el formato low cost, que, según datos de Retail Data, cuenta con 560 tiendas en todo el territorio, está copado por empresas como Supeco (Carrefour) o Cash Fresh. La diferencia es que estas ofrecen descuentos en primeras marcas, mientras que en Mere te puedes encontrar segundas o terceras marcas.
De hecho, para que Mere hubiera tenido más aceptación quizás debería haber cumplido el ambicioso plan y cubrir con más tiendas todo el territorio. Pero lo cierto es que solo ha abierto ocho establecimientos. De ellos, tres cerrarán el próximo 15 de febrero (Parla, Gandía y Valencia).
Parece que solo otros tres se mantendrán abiertos: el de León, Tortosa (Tarragona) y Onteniente (Valencia). Tres lugares dispersos por la geografía española que, además, suponen un problema en la cadena logística de abastecimiento. Y otro problema añadido es que se calcula que sus establecimientos registran pérdidas mensuales de 15.000 euros.
Detrás de Mere
Para conocer los orígenes de esta empresa hay que trasladarse hasta Siberia. La cadena de supermercados Mere es un proyecto de la red comercial rusa Svetofor, fundada en 2009 en la ciudad siberiana de Krasnoyarsk, desde donde inició su expansión en Europa Occidental.
En 2015 decidió ampliar su negocio fuera de Rusia. De esta forma, llegó a Bielorrusia, Kazajistán, Azerbaiyán y China. Una vez implantado allí, decidió acelerar su presencia en Europa, llegando a países como Polonia y Alemania. De hecho, es precisamente en este último país donde la prensa local calificó al grupo de supermercados como el principal competidor de Aldi.
En cuanto a los propietarios de la cadena, la familia es bastante discreta. Valentina Schneider posee la mayoría de las acciones del Grupo Torgservis. Pero, por su edad, son sus dos hijos, Andrei y Sergei, quienes dirigen la empresa de alimentación (además de otras que tienen).
Recientemente, según una estimación de la edición rusa de la revista de negocios Forbes, el grupo ocupó el puesto 147 en el ranking de las 200 empresas no gubernamentales más grandes del país.