Primark cambia de filosofía. La compañía, que siempre se había mantenido reticente a lanzar su propio ecommerce al considerarlo un servicio no rentable, abre las puertas a este modelo de negocio. Y lo hace para competir con sus grandes rivales y para paliar los efectos de la crisis provocada por la pandemia.
No obstante, lo hará de forma tímida. A finales de este mes de marzo lanzará una nueva web en Reino Unido y en otoño hará lo mismo en los otros 13 mercados donde está presente. Y en un principio solo incluirá el servicio de click&collect, es decir, la recogida en tienda de los pedidos realizados online.
“Estamos dando un gran paso adelante en el ámbito digital, tanto en Reino Unido como en el resto de Europa. Eso nos generará ventas y beneficios”, ha reconocido John Bason, director financiero de Associated British Foods (AB Foods), en una entrevista en ‘Reuters’.
Este mismo añadió: “Si hubiera una oportunidad de comercio electrónico para nosotros, probablemente sería más en el área del click&collect”.
Con este nuevo servicio, la web de Primark ofrecerá 10.000 productos, brindará a los clientes información casi en tiempo real sobre la disponibilidad de productos y permitirá extraer los datos de sus más de 24 millones de "participantes" activos.
La compañía irlandesa Primark cuenta con 402 tiendas en todo el mundo. Facturó 7.800 millones de libras (9.300 millones de euros) antes de la pandemia, que le afectó fuertemente. El objetivo es llegar a 530 en cinco años. En España y Portugal posee 65 establecimientos.
Negativa
Primark siempre había defendido que “la combinación del diseño de las tiendas, la experiencia de compra y los precios increíbles son los que hacen que Primark sea tan atractivo”.
De hecho, ocasionalmente consideraron el click & collect como una posible opción para ampliar su atención al cliente. Sin embargo, el plan se quedó guardado en un cajón. Primark llegó a realizar pruebas en este campo. La empresa experimentó en 2013 vendiendo productos a través de una web. No obstante, los resultados no fueron satisfactorios.
Pero ahora hay un cambio de guión en la estrategia motivado por la competencia de grandes compañías como Inditex y H&M o empresas emergentes como la china Shein.