España pasará a formar parte a partir del 1 de enero del grupo de países europeos que han adoptado medidas para hacer frente a la inflación en la cesta de la compra. En nuestro caso, la opción elegida será eliminar el IVA de productos básicos como el pan, la harina, la leche, los quesos, los huevos, las frutas, las verduras, las hortalizas, las legumbres y los cereales.
Estos productos pasarán de tener un IVA del 4% a no contar con este gravamen. En el caso de los aceites y las pastas alimenticias, del 10% pasarán a contar con solo un 5% de IVA. Además, el Gobierno ofrecerá un cheque de 200 euros para la compra de familias con ingresos inferiores a los 27.000 euros.
España no es el único país que opta por medidas para paliar el encarecimiento de llenar el carro de la compra. Hungría congeló en enero los precios de productos como la harina, el azúcar, el aceite de girasol, el cerdo o la pechuga de pollo. Tiempo más tarde, incluyó los huevos y las patatas.
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Recientemente, el país que dirige Viktor Orbán ha decidido prorrogar hasta abril esta medida de 'tope' en el precio de los alimentos básicos. A pesar de ello, este es el país europeo con mayor inflación en la cesta de la compra, con un encarecimiento superior al 40% en el último año.
Son varios los países que han optado por reducir o eliminar el IVA de los alimentos básicos. Tal es el caso de Polonia, que hace justo un año decidió eliminar el impuesto en los alimentos básicos hasta el 31 de diciembre de 2022.
Letonia, Croacia e Italia
Letonia lo ha rebajado del 21% al 5% hasta el 30 de junio de 2024, Croacia lo ha bajado del 13% al 5% e Italia ha propuesto su supresión en productos como el pan, la leche o la pasta, según han explicado desde Aecoc a EL ESPAÑOL-Invertia.
La cesta de alimentación ha subido un 30% de media en Europa, con incrementos como el 52% de los cereales, el 49% de los huevos o el 42% de la leche, en comparación con el último trimestre de 2021, según datos de Eurostat.
En el caso de Portugal, el Gobierno anunció hace un mes que los supermercados e hipermercados tendrían un impuesto especial temporal sobre sus beneficios extraordinarios.
El anuncio coincidió con la publicación de los resultados de la compañía de Pingo Doce, una de las cadenas con más supermercados en el país. De enero a septiembre, obtuvo un beneficio de 419 millones, un 29,3% más que el año anterior. Desde entonces, el gobierno luso no ha vuelto a sacar a la palestra esta medida, que, por el momento, no ha entrado en vigor.
Otras medidas similares
No es la primera vez que se adoptan decisiones en este sentido. Hace dos años, durante la Covid-19, Alemania rebajó el IVA durante medio año. En concreto, aplicó una rebaja temporal del IVA del 19% al 16% y del 7% al 5% para el tipo reducido que se mantuvo hasta diciembre de 2020.
Otra experiencia que perseguía el mismo fin fue la del expresidente de Francia, Nicolas Sarkozy. En 2011 propuso hacer frente a la inflación con una cesta de la compra asequible con una pieza de carne, otra de pescado, una fruta, una verdura, un lácteo o derivado y una bebida.