Mango cierra el año 2022 con un beneficio de 81 millones, un 21% más que en 2021, y con el récord de 2.688 millones de euros de facturación, un 20% respecto al 2021 y más de un 13% respecto a los datos prepandemia, según ha avanzado la compañía en una rueda de prensa celebrada en Barcelona.
El canal físico crece hasta los 1.671 millones de euros a través de 2.566 puntos de venta que tiene el grupo. Durante el año pasado, abrieron 119 puntos de venta nuevos llegando a mercados nuevos como Camerún y Marruecos (países a los que la firma textil regresa).
Por otro lado, el canal online alcanza los 960 millones de euros y supone un 36% de las ventas totales. "Estamos en 90 mercados y durante 2023 queremos entrar en 20 nuevos mercados, la mayoría en África", señalan. Y aunque no llegan a los 1.000 millones de euros de facturación que se marcaron hace años, defienden que “la cuota de mercado del 36% es superior en España que es del 21%”.
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En cuanto al ebitda, ha ascendido a 437 millones (14 millones más que en 2021) y se ha visto afectado por el contexto económico, según la compañía. Mango ha terminado con una deuda neta de 82 millones (frente a los 8 millones negativos del pasado año) debido al proceso de expansión que elevó también la cifra de inversión a 107 millones de euros (el doble que en 2021).
"Queremos que las cifras de inversión en los próximos años sean muy relevantes porque queremos seguir creciendo", ha asegurado Toni Ruiz, consejero delegado de Mango.
Una inversión que ayudará a apuntalar un crecimiento a golpe de nuevas aperturas. Aunque no han querido concretar firma si han asegurado que será a "un ritmo mayor" que el de 2022. Esta expansión se centrará principalmente en EEUU donde cerraron 2022 con 10 puntos de venta y aspiran a llegar a los 40 en 2024.
Asimismo, en Canadá esperan pasar de 95 a 115 tiendas; en India abrirán 35 más y en Francia esperan alcanzar las 300 tiendas en 2025.
En 2023, también llevarán a cabo algunas reformas, como la de la tienda de Fuencarral en Madrid, así como la ampliación de la sede en Barcelona a través de una inversión de 42 millones. Y a lo largo de este primer semestre terminará la ampliación de su centro logístico en Llicà d'Amunt (Barcelona).
En este sentido, Mango ha defendido su compromiso con el país tras el anuncio de Ferrovial de cambiar su domicilio fiscal a Países Bajos. “Mango ha dado ejemplo de la vinculación con el territorio. Nuestro compromiso con Barcelona, Cataluña y España es total independientemente de lo que hagan otras compañías”, ha afirmado Toni Ruiz.
Rusia
El cese de operaciones en Rusia ha supuesto un impacto relevante en la cuenta de resultados de la firma textil. En concreto, de 20 millones. Cabe recordar que en junio del año pasado, Mango decidió abandonar de forma definitiva la venta directa en Rusia después de 23 años operando en el país, y cedió sus tiendas a sus franquiciados ante la incertidumbre de la situación. El grupo empleaba 800 personas en el país a través de 120 tiendas de las que 65 son franquicias.
"Lo que hemos hecho es no tener la actividad y son los franquiciados los que buscan las alternativas a las tiendas", explica Toni Ruiz. Es decir, Mango no envía mercancía a Rusia, aunque los franquiciados mantienen el rótulo de la marca en sus tiendas.