La Generalitat de Cataluña no ha aceptado la fuerza mayor como motivo del Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) en Freixenet y Segura Viudas. El grupo, que acepta la decisión, ha anunciado que continuará negociaciones “constructivas” con el comité de empresa y con los sindicatos con la intención de solicitar un ERTE por otras causas.
En concreto, desde la compañía anuncian que las condiciones climáticas y la respuesta de la generalitat desencadenan una solicitud de un ERTE por razones económicas, técnicas, organizativas o de producción (ERTE ETOP). Este mecanismo desarrollado por la Generalitat tiene como objetivo proteger el empleo.
El motivo de la solicitud original del pasado 22 de abril de 2024 sigue vigente: “La grave falta de uvas y vino base para la producción de Cava conduce a una reducción masiva del trabajo en los procesos de producción”, señalan. Dicho ERTE inicialmente afectaba a 615 trabajadores.
Esto es consecuencia de la sequía extrema en las comarcas del Alt Penedès, Baix Penedès, El Garraf y Camp de Tarragona, que ha vuelto a confirmarse en el Índice de Precipitación Estándar del 31 de marzo de 2024 del Servicio Meteorológico de Cataluña (METEOCAT) y que ha seguido afectando cada vez más al sector desde 2021.
Desde entonces, junto con otros productores de Cava, sindicatos y viticultores, Freixenet viene instando a la DO a actualizar la normativa del Cava y adoptar medidas para contrarrestar la tensa situación de suministro.
Aunque la DO aprobó a mediados de abril medidas extraordinarias para la próxima cosecha, “éstas no son suficientes ni llegan a tiempo para evitar un ERTE”, señalan desde la bodega. Se trata de una crisis que amenaza con tener unas Navidades con menos cava y más caro.
Pese a que la sequía ya ha acumulado un déficit equivalente a 80 millones de botellas en el sector del Cava, el Grupo Freixenet seguro que “seguirá trabajando con todos los agentes implicados para encontrar la manera de superar este reto que afecta gravemente a todo el sector”.