Fitch Ratings ha rebajado la calificación crediticia a largo plazo de Red Eléctrica Corporación (REE) a 'A-', desde 'A', eliminando el 'rating watch negative' y situando su perspectiva en 'estable'.
En un comunicado, la agencia señala que la rebaja en la calificación de la compañía se debe a que el plan estratégico 2018-2022 anunciado el pasado mes de febrero por el grupo "no respalda una estructura de capital consistente con el nivel de calificación 'A' en el medio plazo".
Según Fitch, el alto nivel de compromiso inversor a 2022 de la compañía, con un plan de inversión de 6.000 millones de euros, incluyendo la adquisición de Hispasat, junto con la revisión de la retribución a sus actividades de redes prevista a partir de 2020 no se contrarresta suficientemente con el recorte en el dividendo a partir del año que viene.
La agencia señala que el rating 'A-' de la compañía refleja su bajo riesgo comercial como monopolio natural y operador de la red eléctrica en España, así como la creciente fuente de ingresos del negocio de telecomunicaciones y las concesiones a largo plazo de proyectos de transmisión en Perú y Chile.
Asimismo, indica que la perspectiva 'estable' refleja su expectativa de un impacto "moderado" de la revisión regulatoria a partir de 2020.
El plan estratégico de la compañía presidida por Jordi Sevilla prevé unas inversiones de 6.000 millones en el periodo 2018-2022, que casi duplica la cifra ejecutada en el periodo 2014-2018 (unos 3.200 millones de euros).
En torno al 55% del importe se destinará a actividades reguladas en España, el 28% al negocio de telecomunicaciones, en gran debido a la compra de Hispasat, y el 17% a concesiones de transmisión a largo plazo, principalmente en Latinoamérica.