Las cinco grandes compañías eléctricas y gasistas españolas --Enagas, Red Eléctrica, Naturgy, Endesa e Iberdrola-- acumulan una pérdida de más de 6.510 millones de euros de capitalización en Bolsa a raíz del anuncio de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) de recortar la retribución que reciben por el transporte y distribución de gas y electricidad.

 Desde que el jueves de la semana pasada ciertas informaciones aparecidas en prensa especulando con ese posible recorte desatasen una caída del precio de las acciones de todas ellas que se ha extendido hasta el cierre de mercado de este viernes, la capitalización bursátil de estas cinco grandes empresas se ha visto mermada en más de 6.510 millones de euros.

 Aunque, en general, el desplome del precio de sus acciones se ha suavizado en la última semana, ya que en tan solo dos días --el jueves y viernes de la semana pasada-- perdieron 4.400 millones de euros, frente a los 2.110 millones perdidos en los últimos cinco días, todas ellas han seguido registrando desde el lunes rebajas en el precio de sus títulos.

ENAGÁS CAE UN 20% EN BOLSA

 En términos porcentuales, la compañía más afectada por la propuesta de la CNMC ha sido Enagás, que ya acumula un desplome del 20% en las últimas siete jornadas bursátiles. En concreto, si la circular de Competencia se materializa antes del próximo 1 de enero de 2021, la retribución inicial de las inversiones en el transporte de gas y regasificación, medida que afecta principalmente a Enagás, se verá recortada un 21,8%.

 Ante esta situación, Enagás, que cuenta con una capitalización total de 4.574 millones de euros, se ha dejado en el parqué más de 1.000 millones de euros desde el jueves pasado. Este viernes, sus títulos cayeron otro 0,60%.

NATURGY CEDE CERCA DE 2.200 MILLONES

 La segunda empresa que más se ha visto afectada por la publicación de estas circulares ha sido Naturgy, que este miércoles anunció una paralización temporal de las inversiones de su filial de distribución de gas Nedgia mientras analizan el impacto que tendrá la medida.

 Pese a que este viernes sus títulos rebotaron un 0,53%, Naturgy acumula una caída del 9,3% desde el pasado jueves, lo que se traduce en una pérdida de más de 2.183 millones de euros sobre su capitalización total de 22.655 millones de euros. Competencia plantea una rebaja del 17,8% en la distribución de gas.

PARA REE, LA PROPUESTA ES "DISCRIMINATORIA"

 Por su parte, el recorte planteado a la retribución del transporte de electricidad del 8,2% ha provocado que las acciones de REE se hayan hundido un 7,2% en los últimos siete días, después de que este viernes haya retrocedido otro 0,17% en Bolsa.

 Esto se traduce en una pérdida de 725 millones de euros. Esta semana, su presidente, Jordi Sevilla, ha transmitido que la propuesta de la CNMC ni abarata el servicio ni aporta una mayor eficiencia al sistema, al mismo tiempo que un informe de la compañía considera que aporta incertidumbre y es discriminatoria.

UN MENOR RECORTE PARA ENDESA E IBERDROLA

 Por su parte, el menor recorte del 7% propuesto para la distribución de electricidad, que afecta sobre todo a Endesa e Iberdrola, ha afectado en menor medida a estas dos compañías, que este viernes han cerrado con descensos del 0,88% y del 0,49%, respectivamente.

 A lo largo de los últimos siete días de mercado, Endesa se ha dejado en el parqué casi 1.000 millones de euros, un 3,9% de lo que capitalizaba a cierre del mercado del miércoles 3 de julio (24.840 millones), mientras que Iberdrola ha perdido 1.542 millones, un 2,8%, aunque es la empresa que más dinero capitaliza (53.350 millones).

 LAS GASISTAS PLANTEAN LA VÍA JUDICIAL

 Ante esta situación, las empresas gasistas afectadas por este posible cambio normativo se plantean llevar a la CNMC ante los tribunales españoles si el recorte llega a materializarse, porque creen que "se pondría en riesgo las inversiones necesarias para avanzar en la transición energética y la descarbonización".

 Por su parte, la CNMC considera que este nuevo criterio permitirá una rebaja de los peajes que pagan los consumidores a través de la factura energética, lo que supondrá un abaratamiento de la misma, al mismo tiempo que garantizará una rentabilidad "razonable" para las empresas reguladas.

 Además, para el regulador este cambio no llega por sorpresa, ya que ha insistido en que se da una respuesta a un criterio que ya llevaba manteniendo durante los últimos seis años de que se estaban otorgando rentabilidades "excesivas", sobre todo en el sector del gas, donde menos inversiones ha habido.