El consejo de administración de Repsol se ha fijado un objetivo de cero emisiones netas en carbono para 2050 y en esa línea presentará en el primer semestre de 2020 su plan estratégico 2021-2025, en el que incrementa su capacidad de generación de electricidad baja en carbono en 3.000 megavatios (MW), hasta llegar en 2025 a los 7.500 MW.
Con esta decisión, el grupo presidido por Antonio Brufau, se convierte en la primera compañía de su sector en asumir el objetivo de cero emisiones netas en 2050, informó el grupo.
En este camino hacia la descarbonización de la compañía en los próximos 30 años, anunciado el día en que se inauguró la COP 25 de Madrid, Repsol se plantea nuevas metas de reducción de su indicador de intensidad de carbono sobre la base del año 2016: del 10% en 2025, del 20% en 2030 y del 40% en 2040, avanzando así hacia las cero emisiones netas de CO2 en 2050.
SIN IMPACTO EN LA RETRIBUCIÓN
La petrolera ha informado este lunes de que la asunción de un nuevo escenario de precios crudo y gas acorde con los objetivos climáticos del Acuerdo de París le llevará a corregir el valor contable de algunos activos del grupo, con un impacto de unos 4.800 millones de euros después de impuestos, lo que reducirá el resultado del ejercicio de 2019, que se cerrará así con pérdidas, aunque no afectará ni a la generación de caja ni a la retribución a los accionistas.
"La generación de caja de las operaciones en 2019, que aumentó un 22% a septiembre respecto al mismo periodo de 2018, permitirá alcanzar una retribución a los accionistas de un euro por acción, formular la propuesta a la próxima Junta General de Accionistas de amortizar un 5% del capital social (adicional a las amortizaciones de las acciones emitidas en los programas de dividendo flexible) y plantear más recompras y amortizaciones de acciones propias cuando los excesos de caja no se apliquen a corto plazo a oportunidades de inversión con la rentabilidad exigida", detalla la compañía.
“Estamos convencidos de que debemos fijarnos objetivos más ambiciosos en la lucha contra el cambio climático. Creemos que el momento para Repsol es ahora", señala el consejero delegado de Repsol, Josu Jon Imaz. Y añade: "Lo hacemos con la plena confianza de estar apostando por el futuro. Solo abordando con claridad estratégica los grandes retos que tenemos ante nosotros podremos convertirlos en oportunidades. Estamos convencidos de que ello refuerza nuestro proyecto, atrayente, sostenible y rentable para todos nuestros stakeholders”.