La fiebre por invertir en renovables no solo es de los fondos de inversión. La industria agroalimentaria en España lleva años diversificando su negocio e incluso algunas grandes empresas llevan ya diez años desarrollando parques eólicos. 

Es el caso del aragonés Grupo Jorge, uno de los mayores grupos cárnicos de España con presencia en el sector porcino desde hace 80 años. Desde finales de 1990, la compañía -además de exportar jamón a China- cuenta con una división de energía y en 2016 saltó a la arena energética española al ser uno de los adjudicatarios de la primera subasta eléctrica para construir parques eólicos. 

Más aún. De este grupo de alimentación, uno de los hermanos fundadores, Fernando Samper, creó el gigante renovable Forestalia, que en marzo pasado vendía a Repsol un proyecto eólico con una capacidad de 860 MW para construir 26 parques eólicos; un pelotazo por una cifra millonaria -que no trascendió, pero se calculó en un millón por cada MW-, tal y como adelantó Invertia.

Grupo Enhol

Y de Aragón a Navarra. En este caso se trata del Grupo Enhol. Se podría decir que desde hace 40 años, comparte su interés por el negocio energético y el agroalimentario. Actualmente tiene una división dedicada a la producción y comercialización de alimentos germinados, a los forrajes para el consumo animal y semilla de alfalfa, pero acumula más de 700 MW eólicos en España, Bulgaria y México.

Reconoce que su negocio renovable es ahora la rama más importante del Grupo y no solo se dedican a desarrollar parques eólicos, también apuestan por el autoconsumo, la biomasa o la valorización energética de residuos.

En los próximos meses invertirá 146 millones de euros para construir cinco parques eólicos de 166 MW en la comarca Ribera de Navarra, pero tiene previsto añadir a su cartera cuatro plantas solares fotovoltaicas más. 

"En el caso de Enhol, entraron en el sector energético al invertir en cogeneración, pero en el caso de las otras empresas, muchas lo hicieron por diversificar su negocio", explica a Invertia Yann Dumont, consejero delegado de la consultora en renovables Reolum, "de hecho en algunos casos ya supone el 50% de su Ebitda, de sus beneficios antes de impuestos, la venta de su generación eléctrica en el mercado mayorista". 

"Además, es muy interesante observar que son empresas que se han involucrado en toda la cadena de valor, desde la promoción o el desarrollo hasta el mantenimiento, participan en todo el negocio", añade.

Grupo Samca

Otros aragoneses que también han hecho un guiño a las renovables es el Grupo SAMCA. En su web dice que está presente en los sectores de minería, renovables, química y agroalimentario.

Comenzó a desarrollar proyectos eólicos en el año 1995 y actualmente, a través de las empresas Molinos del Ebro y Molinos del Jalón, dispone de parques eólicos en operación con una potencia total de 300 MW.

Sorprende este grupo empresarial por haber invertido en energía termosolar, es decir, que aprovecha la energía térmica que produce el calor de los rayos del sol y los canaliza para calentar un fluido. Posee dos de las pocas centrales termosolares que existen en el mundo, CST La Florida y CST La Dehesa, ubicadas ambas en la provincia de Badajoz y con una potencia total instalada de 100 MW.

Aceites del Sur-Coosur

Aceites del Sur o Acesur es una compañía andaluza puramente agrícola, dedicada tal y como dice su nombre, a la producción y comercialización de aceite de oliva. Sin embargo, aunque el 75% del volumen de negocio corresponde a venta de aceite envasado, un 10% procede de la venta de electricidad y de biomasa para producción energética o de calor a través de la empresa Enersur, filial de Acesur. El resto, un 5% viene de las salsas y vinagres y el resto son semillas, aceites a granel y subproductos del aceite.

Sus inversiones renovables están más enfocadas a la producción de biodiesel, biomasa y cogeneración, utilizando sus recursos agrícolas para aprovechar al máximo sus residuos.

"En poco tiempo poner en marcha medidas de economía circular será imperativo legal", explica Dumont de Reolum, "será obligatorio que cada vez haya más tendencia a buscar alternativas a los residuos o a la reutilización de los productos de las empresas para ser sostenibles". 

Explotaciones ganaderas, agrícolas y pesqueras

Mientras estas empresas han dedicado una buena parte de sus esfuerzos financieros y sus estrategias a desarrollar proyectos renovables como un negocio más, las iniciativas de autoconsumo triunfan en las explotaciones agroganaderas e incluso en el sector pesquero. 

Es lo que ha hecho la Cofradía de Pescadores de Tarragona que acaba de inaugurar una instalación de autoconsumo sobre sus edificios que ahorrará al año casi 35.000 euros en gastos energéticos.